Capítulo dedicado a anni22aguilar. ¡Mil gracias por tu apoyo! :')
----------
4. La maldad se celebra bebiendo un cosmpolitan
Repito mi rutina del día anterior con la única diferencia de que ahora tengo la leve noción de en qué me estoy metiendo.
Noción.
Por ello, recordando que escuché decir a los invisibles que Ivanna es de las primeras en llegar a Doble R, me presento veinte minutos antes. Aun así, cuál es mi sorpresa cuando escucho a Balta reclamarme:
—¿Qué haces aquí?
Tanto él como Nora están llegando. ¿Qué debería contestar? ¿«Aquí trabajo»?
Ve la duda en mi rostro.
—¿No ibas a cazar con Ivanna?
«Sí, eso ordenó el señor Rodwell, pero...»
—¿Sí? —De repente siento acidez. ¿Qué no sé?
—Puede alegar que no le sabes llevar el ritmo y utilizar eso como motivo de despido —me advierte Nora.
—Pero, pero... —Ni siquiera tengo idea de qué hablan.
—Ella rara vez viene a la oficina, hijo —aclara Balta mirando su reloj.
¿Entonces dónde carajos la encuentro?
—Ayer por la tarde llamó a Grisel para que le dejara unos papeles en recepción —interviene Nora—. Iba a venir por ellos a primera hora.
—Bien. Tienes suerte entonces, hijo —dice Balta—. Isadora entra 15 minutos antes que todos, lo que quiere decir que... —vuelve a mirar su reloj. Yo también miro el mío— si Ivanna iba a pasar por esos papeles a primera hora del día ya debe estar abajo —Empiezo a mover mis pies—. Tienes el tiempo justo.
Y lo aprovecho corriendo de la oficina al corredor principal del cuarto piso, y luego al elevador.
«¡Vamos, vamos, vamos!»
Al nomás llegar el elevador me disculpo con las personas que debo empujar para entrar lo antes posible, incluida Grisel que no parece sorprenderse, y rápido presiono el botón que me devuelve a la recepción.
—¡Al final de cada jornada debes preguntarle en dónde se juntarán al siguiente día! —me aconseja Grisel antes de que las puertas se cierren y le doy las gracias por el aviso.
«Dios, yo nunca te pido nada pero hoy hazme un favor: que Ivanna aún se encuentre en recepción», rezo sudando frío. ¿Qué le diré al señor Rodwell si no hago bien esto?
—Que todavía esté en recepción, por favor —continuo rezando al salir y luego de empujar a más personas corro hasta el puesto de Isadora. Me apresuro a preguntar por Ivanna pese a que está atendiendo a otros.
—Se acaba de marchar —contesta Isadora, molesta; pero tampoco le sorprende que casi llorando pregunte por mi jefa—. Si tienes suerte la alcanzarás en el estacionamiento.
—Estacionamiento —repito, tragando saliva.
Isadora señala el elevador.
—Es subterráneo, utiliza el elevador —aconseja y corro hacia allá.
...
Al salir del elevador me detengo sobre una acera y veo una fila de coches entrando, cada uno buscando su sitio para aparcar. ¡Son muchos! Doble R debe compartir estacionamiento con algún otro edificio.
ESTÁS LEYENDO
El asistente ©
RomanceLos apodos: Bruja, Víbora, Suripanta, Casquivana, Cruella de Vil, Vampiresa, Maléfica, Anaconda, Reina roja, Medusa y Loba, se quedan cortos a la hora de describir a Ivanna Rojo; y es que pese a tratarse de una mujer increíblemente atractiv...