Dulce Venganza

Un tiempo después.

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:D

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Ezarel tenia la cabeza recargada contra el tronco de un árbol mientras tenia los ojos cerrados, su mente se ponía a divagar en como es que termino así mientras sus labios se movían de forma automática haciendo un conteo.

-cuatro mil novecientos cincuenta y ocho, cuatro mil novecientos cincuenta y nueve... cinco mil.- dijo por ultimo para mirar tras de él, el claro del bosque era sumamente tranquilo, demasiado como para pasar por alto que había siete pequeños demonios escondidos por algún lado.

Habían pasado cuatro años desde el nacimiento de los hijos de valkyon y tal como había prometido Ezarel había quedado como niñero de los tres, sobre todo de la pequeña Valen, quien había sacado toda la ternura de valkyon cuando era niño, solo esperaba que al crecer no fuera como su madre...

Camino entre los arbustos buscando a su primera víctima, Ezarel alargo su mano tras de su para atrapar una mata de cabello rubio.

-¡Suelta suelta!- exclamo una pequeña de largos cabellos rubios ojos jade y orejas puntiagudas.

Esa pequeña era nada mas y menos que una de las hijas de Ezarel, la cual nació poco después que los trillizos, justo después de ese día había llegado una recluta nueva Reom... quien ayudaba a Ewelein en la enfermería como reemplazo de Valissa, la chica era rebelde, si, pero el flechazo que sintió por él elfo fue extrañamente correspondido tanto que no tardaron más que unos meses en unirse y formar su familia.

-Nada de eso duende.

-¡SOY UNA ELFO!- grito la pequeña, Ezarel la puso sobre su hombro tal cual saco de papas para mirar dentro del hueco de un árbol

- Dona y Danna están atrapadas.- dijo y del árbol salió una pequeña idéntica a la otra, a diferencia de su hermana Dona, Danna era mas tierna y tranquila aunque cuando quería era una autentica diablilla como el padre.

- Princesa Valen, esconderse tras los rosales no es una buena idea.- las gemelas inflaron las mejillas, para ellas Valen la hija de su tío Valkyon era una princesa mientras que para su propio padre eran duendes o pitufitas.

-¡No es justo, aun no tenias que encontrarme!- exclamo la pequeña de cabellos chocolate y ojos dorados.

-Me pidieron jugar con ustedes así que nada es justo...Lance, Lyon... a su madre le dará un infarto al verlos llenos de barro salgan de ese charco ahora.

Los hermanos de valen se habían camuflado no tan perfectamente dentro de un charco de lodo esperando que su tío no los fuera a encontrar, no cabía duda que eran niños de cuatro años... y hablando de eso aun el faltaba encontrar a dos... soltando un cansado suspiro levanto su mirada la cielo sintiendo como algo húmedo caía, sin quererlo dejo caer a su hija mientras miraba a terrado.

-¡LENA!- Grito para subir al árbol, Lena una pequeña rubia de no mas de nueve meses estaba colgando boca abajo en la rama más alta de un árbol... la tomo con cuidado, por suerte no tenia heridas o algo malo, no quería imaginarse al padre hecho una furia si ya de por si era bastante sobre protector con su mujer e hija...- ¡Lilith esto no fue divertido!

La pequeña nombrada hija de Nevra salió de su escondite dentro del agua con el cabello y ropa chorreando.

-Ella también juega...-la pequeña vampiresa bajo su mirada y puso ojitos de cordero a medio morir carita que siempre le funcionaba.