Una chica de golf

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— no señor, bájese de ahí que se va a romper algo— regañé a Ramón quien se había subido a una de las mesas de noche de mi cuarto en busca de quien sabe que — y si algo te pasa tu mamá me mata.

Ramón y yo habíamos llegado a LA hace dos días y desde entonces no habíamos salido de la casa, extrañaba mi casa, mi cama, mi cocina y mi vida cotidiana antes de la gira, sin embargo, lo que más extrañaba era a poché, no había día en que no me arrepentía de haberle conseguido ese trabajo con ariana, de no haberla despedido justo ahora estaríamos juntas.

Pasaban de las 11 pm y aun no me dormía esperando su llamada, hoy era el último de los conciertos de ariana del año y al día siguiente ella iría a Bogotá y después de eso a Europa, ya no la vería hasta el 17 de enero en parís.

Yo estaría en New York cantando en Time Square para la noche de año nuevo, lo cual me tenía emocionada ya que tampoco tenía con quien pasar año nuevo y de esa manera al menos estaría sobre el escenario y kurt estaría en Italia con la familia de Fabio también lo vería hasta el primer concierto que daríamos en Ámsterdam, donde abriríamos mi minigira por Europa.

Terminé de ponerme el pijama pensando en el regalo de navidad que tenía ya casi pactado para poché, solo faltaba una cosita. Ella me había dicho que necesitaba hablar conmigo de algo y mas o menos sabía a lo que se refería solo esperaba que poché no me invitara a pasar navidad con ella y su familia en Bogotá, no quería hacerla sentir mal al decirle que no. No era por ella, pues no había nada en el mundo que deseaba más que pasar la navidad con poché, sin embargo, lo que no quería era estar en Bogotá para navidad, simplemente era algo demasiado doloroso.

Me acomodé en la cama al lado de Ramón y puse "Queer Eye" en Netflix mientras esperaba a que poché nos hiciera nuestra videollamada nocturna como había prometido. Antes de las 12 de la noche mi celular sonó, era poché.

Me arreglé un poco el cabello antes de poner mi celular frente a mi y contestar la llamada, inmediatamente apareció poché en la pantalla con una gran sonrisa en el rostro, se veía cansada y feliz al mismo tiempo.

— Los amores de mi vida— dijo en cuanto nos vio en la pantalla.

Ramón ni siquiera le prestó atención, solo se dio una vuelta y se acomodó para dormir sobre la almohada que estaba a mí lado.

— hola bebé— dije

— los extraño demasiado, ¿Cómo han llevado estos dos días en Los Ángeles? — preguntó poché mientras acomodaba su teléfono de manera que quedaran sus manos libres.

Platicamos un ratito de lo que habíamos hecho Ramón y yo desde que llegamos, me contó algunas cosas que ella había hecho, después de unos minutos escuché que alguien estaba en la habitación con ella, me había comentado que compartía habitación con otra chica durante la gira.

— holas— dijo poché a su compañera

— holi— escuché que alguien dijo en esa habitación.

Poché regreso su mirada hacia mí con una sonrisa y cuando estaba a punto de volver a hablar la chica la interrumpió nuevamente

— fui por donas a escondidas de Brian, pensé en ti y te traje estas— escuché que dijo la chica.

Automáticamente me puse en alerta, poché sonrió y movió sus manitas con felicidad cuando recibió una caja de donas, ese movimiento que me parece tan tierno y que me gustaba que reservara solo para mí. Levanté mis cejas y me llevé el dedo pulgar a la boca mordiendo un poco mi uña, pero sin hacerle daño. Poché notó inmediatamente mi cambio de actitud y regreso la vista a la cámara.

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