Mi Sexy Boos (KooKmin) ~ [Terminada]

💕6. Sentimientos 🔞

Jungkook estaba decidido a llevar la fiesta en paz con Jimin, pero su amor-odio por él no le dejaba hacer cosas coherentes, no entendía como aún después de las duras palabras del rubio, a él le pareciera tierno minutos después, no sabía que le sucedía, últimamente desde la llegada del rubio a su vida no podía controlar ni siquiera lo que comía, estaba perdiendo el control de su vida.

O cambiaba de pensamiento y era más rudo con él para que se fuera de la empresa, o le hacía caso a su amigo Tae y abría su corazón, no estaba seguro aun, pero de algo si estaba seguro era que debía pensarlo y decidirse pronto y que había olvidado su botella afuera, así que dejo de pensar y salió del baño importándole poco sus fachas.

— Lo siento, olvidaba esto — Se disculpó al salir del baño, tomo su Jack's Daniel aun con un poco de líquido y busco con la mirada al rubio quien suponía ya estaría acostado.

— No hay pro... — Cayó brutalmente al ver a su jefe solo en bóxer.

Joder era la cosa más varonil y caliente que el rubio hubiese visto, hombros anchos, brazos bien marcados y unos pectorales de infarto, y ni hablar de su amigo entre sus piernas, Jungkook estaba para comérselo completo, y no dejar ninguna sobra.

El pelinegro al percatarse del cierto sonrojo que su desnudes provoco en Jimin, decidió joderlo un poco, dejando toda la mierda de pensamientos que le embargaban.

Tomo lo último que quedaba de la botella, y camino lentamente en dirección al rubio, este al ver las intenciones de Jungkook de acercarse, en un movimiento rápido cerro su maleta e intento correr fuera de la habitación hasta la sala, pero más hizo el esfuerzo físico ya que fue alcanzado a media puerta.

— ¿Q-Que e-es lo que haces? — Pregunto con dificultad por el forcejeo con su menor, este lo había abrazado desde atrás enrollando sus brazos en su cintura, enterrado su cabeza en el cuello de Jimin.

¡Y Dios!

Moriría en esos brazos y no se arrepentiría, no quería dar paso a sus deseos no con Jungkook ebrio, en definitiva, no debía, pero todos sus sentimientos se mezclaron al igual que el paquete que se sentía entre su trasero, se lo estaba poniendo difícil, muy difícil.

— Mmm~... Mierda hueles delicioso — Esa fue la respuesta del menor, ignorando la pregunta del rubio y afianzando más su agarre, sin intención de soltarlo.

Jamás admitiría que solo el tenerlo así lo hacía olvidar el pasado y toda su mente se fijaba en él ser tan hermoso entre sus brazos.

"Quizás Tae tenga razón, ¡A la mierda! si esto no resulta diré que fue el alcohol" pensó el menor inmerso en el olor dulzón de su Jimin.

— Ju-Jungkook, suel... suéltame — Jimin se retorcía entre las manos del otro, su corazón le estaba jugando mal al acelerarse de esa manera, sabía que Jungkook solo lo estaba molestando y su amigo se estaba comenzando a alegrar, debía salir de esos brazos lujuriosos o estaría jodido — ¡QUE MIERDA TE PASA! — Grito ya cansado de intentar zafarse, cuando era evidente que Jungkook era más fuerte que él, aunque su cuerpo rogaría por pegarse más a ese gran hombre, su dignidad y orgullos le gritaban que saliera de ahí.

— ¿Que, que me pasa? — Indignación resonaba en cada silaba dicha — Me pasa, ¡QUE TE SIGO AMANDO, QUE TE DESEO JIMIN! — Sintió como un peso se fue de su pecho al decirlo en voz alta, guardarlo por tantos años fue tan difícil, al tiempo que gritaba, fue soltando poco a poco a Jimin.

Sin poder responder Jimin se, dio vuelta lentamente, hasta quedar frente a frente de Jungkook, con todos los latidos desbordados que daba su corazón. Sin creer que lo pudo haber dicho, era imposible pensaba fugazmente el rubio.