Mi Sexy Boos (KooKmin) ~ [Terminada]

💕59. Felicidad

La casa seguía siendo igual como el menor la recordaba desde la última vez que se fue de ahí, con los mismos adornos viejo que tanto le gustaban a su padre, las mismas cortinas e incluso manteles, su madre la mantenía tal cual y como le gustaba a su padre con ese toque antiguo, rustico, y eso no podía incomodarlo más.

La señora Jeon les había recibido con el mismo entusiasmo de siempre, asiéndolo recordar los viejos tiempo cuando llegaba del trabajo y ella le recibía contenta. Habían sido buenos tiempos para él, debía admitirlo.

— ¡Oh! enserio, esa es una muy buena oportunidad Jiminnie~ — Escucho a su madre, poniendo atención a la plática mientras comían.

Las niñas estaban frente a su madre ella locamente se había ofrecido a alimentarlas para que ellos comieran cómodos el estofado de cerdo que había preparado, siendo esta una de las comidas favoritas de Jimin. Además, que había dado el día libre a la servidumbre para no incomodar a su yerno con la chica esa como la primera vez que llegaron.

— Me alegra que todo esté en su lugar, como debió ser desde un inicio sin que nadie se les interfiera — Dijo la señora Jeon, pero su tono era algo desesperanzado.

Jimin inmediatamente observo a Jeon en busca de algo para decir, pero este no hizo mayor intervención, este sabía que lo decía por lo que había hecho ella y su esposo.

— Q-Que deliciosa está la comida — Menciono por cuarta vez Jimin.

Tratando de evitar que ella se sintiera mal o pensara en el doloroso pasado.

— ¡Oh~ enserio! ¿Quieres un poco más? — Pregunto la señora emocionada.

— Si, si se puede — Respondió y era sincero la comida esta riquísima tanto que no estaba mal repetir.

— Y tu Kook no quieres más...

— No gracias — Su madre asintió dudosa por su tono de voz, pero aun así desapareció por la cocina.

— ¡Oye, que tienes! — Jimin estaba preocupado.

El ambiente entre su esposo y su madre era evidentemente incómodo y raro hace ya unos minutos atrás sin contar que Jeon estaba muy distraído, nada parecido a la última vez que se vieron, debía pasar algo.

— Nada, solo no tengo tanta hambre... — Mintió.

Las cosas con su madre ya se habían arreglado, pero, una noticia de hace días por parte de Pepe le hacía dudar nuevamente de muchas maneras de ella.

— Tu no me engañas Jeon, a ti algo te pasa algo, dime~...

— Enserio amor no tengo hambre — Jimin asintió un poco dudoso.

Quizás a su esposo aun le dolía la garganta y él se estaba imaginando cosas con el ambiente, quizás y solo quizás estaba paranoico, así que dejo de insistir al ver a su suegra volver.