Mi Sexy Boos (KooKmin) ~ [Terminada]

💕14. Todo Esta Mal

Tres días...

Tres días en los que el pelirrubio había tenido que aguantar a la tal "Arin" rondando por la oficina compartida y la falta de huevos de su prometido para explicarle a la pubertad que la boda organizada era de él y Jungkook, no suya.

En esos días él no le había dirigido palabra alguna al menor, él estaba en la Oficina del señor Jeon desde el momento de la llegada de la niña, incluso había mandado a Jin a traer la ropa que tenía en el departamento de Jungkook. ¡No le quería ver ni la cara!, lo bueno de todo esto era que su suegro estaba de su lado, evitando que Jeon se le acercara en el trabajo, incluso hacia chistes y bromas de como estaría sufriendo su hijo.

Al contrario del pelirrubio el menor solo pasaba mandándole miles de textos con disculpas, cartas y flores a la oficina de su padre, rogando para que le dejara verle, incluso había mandado a poner una carpa fuera de la casa de Jin para dormir ahí y estar secar del mayor y poder rogar por su perdón. Pero todos y cada uno de sus intentos no habían funcionado los últimos días.

— Flores esas no fallan — Dijo una de las secretarias del circulo donde Jeon se encontraba pidiendo ayuda.

— Ya lo hice, incluso le mandé sus favoritas — Confiesa el menor angustiado.

— ¡Chocolates! — Grita otra.

Jungkook rápidamente lo anota en la libreta que tenía en sus manos y les mira esperando otra respuesta.

— Serenata y una joya preciosa, eso podría servir — Menciona otra de las secretarias emocionada. Jungkook lo anota nuevamente.

— Rico sexo — El silencio cae entre el circulo de mujeres y le dan paso a la voz fuera de él — Una noche de pasión, buen vino y una disculpa también serviría — El Joven alto guapo y pelinegro les mira sonriendo.

— No creo que eso funcione para alguien como mi prometido — Responde molesto el pelinegro por el atrevimiento de tal patán al hablar así de alguien a quien no conoce.

— Créeme esa nunca falla — Ríe con sorna llenándose de suficiencia. Jungkook no responde más la mirada retadora entre ambos jóvenes dice más que mil palabras.

— Y dime ¿En que puedo ayudarte? — Observa al joven esperando una respuesta contundente de su estadía en su empresa.

— ¿Joven Park Chanyeol? — Pregunta la secretaria de su padre. Haciendo que el pelinegro ensanche sus ojos por la impresión — El señor Jeon y el Joven park le están esperando.

Antes de que Jungkook logré reaccionar se encuentra con la espalda del sujeto, el cual entra en la oficina de su padre para después ser cerrada esta con llave, sin darle tiempo a detenerle

"¿QUE CARAJOS HACE EL AQUÍ?" se pregunta, angustiado.

"Arregla esto Jeon, o no me importaría ser el esposo de Chanyeol" Las palabras de su novio días atrás, caen como una bofetada directa a sus bolas.

"Jimin no sería capaz" intenta convencerse a sí mismo.

Olvidando la infinidad de papeles sobre su escritorio se escabulle sigilosamente hasta la oficina de su padre, donde entro con paso firme el joven pomposo y engreído.

Se pega a la puerta ignorando las miradas de burla y desaprobación de sus empleados, a lo que respondía con una mirada de "Ustedes me la pelan" a cada que le observaban en su posición de espionaje.