❝Un poco de Amor❞ ❬Tomo 1: f(x)❭

04 - Unnie

Título: Unnie
Pareja: Sultoria
Extensión: 619 palabras
Tipo: Viñeta
Nota: Contenido explícito

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•설리•

Durante la adolescencia es normal que nuestras hormonas se alboroten, es normal que comencemos a sentir atracción por otras personas. Puede ser un amigo, un profesor, tal vez el vecino.

A mi me gusta mi vecino, bueno, mi vecina. La señora Song es realmente sexy y yo se que ella también me desea.

Si, si. Lo se. Mientras que a otras chicas se les alborotan con cualquier Idol, yo lo hago con mi vecina, la madre de Amber, mi mejor amiga.

Desde que conozco a la señora Song, he sentido una atracción inmensa. No solo me fusta, quiero que ella sea mi primera vez en todo. En besar, en amar, en la intimidad...

Esa era mi meta, estar con Victoria Song.

Aquel sábado Amber había ido a su entrenamiento de baloncesto, y su padre la había acompañado. Eso solo significaba una cosa, mi hermosa señora estaba sola. Fui hasta el portón de mi vecina y toque el timbre, ella me abrió con una dulce sonría.

—Amber no esta querida.

—Lo se, venia a verla a usted.

—¿A mi? ¿Para que Sulli?

—¿Puedo pasar?

Y Song me dio pasa a su hogar. Una vez dentro fui hasta su sala, nos sentamos frente a frente, no sabia como empezar. Tenia miedo de quedar cono una boba, ella me miraba desconcertada, mas bien curiosa. Me deje llevar por mis instintos, me acerque a ella y la bese, tan apasionadamente como me fue posible. Ella al principio se negó, pero después cedió y correspondió mi beso de igual forma.

El beso se tornaba mas y mas pasional, ya había caricias y algunos jadeos. Me sentía desesperada por hacerla mía, o que me hiciera suya, que era lo mas probable.

Su blusa rozaba su suave piel, cayendo al suelo. Mis manos actuaron por si solas desabrochado su sostén, dejando al descubierto esos hermosos senos, serian mios.

Mis labios bajaron a sus pezones, pasando por su cuello haciendo que Victoria jadeaba levemente. Era delicioso tener su cuerpo en mi boca, excitante.

Pronto, ella decidió tener  el control de las cosas, me quito mi blusa, haciendo lo mismo que yo le hice. Mordía y lamia mis pezones, pero ella tuvo el atrevimiento de posar una de sus manos por mi intimidad, acariciándola haciéndome jadear. Comencé a sentirme húmeda. Quería mas y ella lo sabia.

Subió mi falda y bajo mi ropa interior, posando su cabeza entre mis piernas, mientras que con un dedo me penetraba, su legua jugaba con mi clítoris. Estaba a punto de enloquecer.
Cuando estaba a punto de llegar a mi orgasmo ella se detuvo, se levanto y me dedicó una sonrisa entre sexy y picara, la entendí perfectamente.

Era su turno, baje su pantalón y me coloque entre sus piernas, imitando las acciones que anteriormente ella realizo en mi. Tuve el placer de escucharla gemir mi nombre.

Ella no permitió que terminara, me pidió que me recostada sobre el suelo y que abriera mis piernas, ella se posiciono sobre mi. Había visto esta posición en algunos vídeos porno, como burla llame a la posición "tijeras", pero no creí que fuera tan placentera. La señora Song se movía bien, muy bien. No podía callarme, me hacia sentir la mujer mas jodidamente complacida del mundo.

Sus movimientos fueron rápidos, placenteros que puedo jurar haber  tenido multiorgasmos ese día.

Al terminar, simplemente nos vestimos y me pidió que la acompañara a la cocina, le ayude a hornear galletas.  Amber y su padre llegaron poco después de que termináramos... se preparar dicho postre.

Desde aquel día no volví a ver a la señora Song de la misma manera, ni ella a mi. Ahora, siempre ansió que Amber se vaya con su padre a entrenar baloncesto.