Momentos de Shinachiku Uzumaki

🦊. Entrena a tu mascota (3/3)

Entrena a tu mascota parte 3

Luego de un largo día de trabajo lo único que Naruto Uzumaki quería era llegar a casa, abrazar a su esposa e hijo, darse una ducha, cenar e ir a la cama. Pero ese no iba a ser el caso, lo supo en cuanto abrió la puerta de la entrada y solo se escuchó silencio, la luz del salón estaba encendida y el sabía lo que eso significaba.

Problemas.

—Y-ya estoy en casa —anuncio temeroso el shinobi, asomando con lentitud la cabeza por la entrada del salón.

—¡Llegas justo a tiempo, mi amor! —canturreó la voz de su esposa.

—Estoy muerto.

—Pasa, pasa —lo animo Sakura con una sonrisa entre felicidad fingida y sadismo— Justo te estábamos esperando.

Naruto trago grueso, algo realmente malo tuvo que haber hecho que la pelirrosa se enteró y ahora quería castigarlo.

—¿S-Si?

—Si, Kurama y yo te hemos esperado desde la tarde —le comento mientras agitaba entre sus manos una fusta, de aquello no se había dado cuenta antes el rubio— Pasamos una tarde bastante amena juntos, nos lo pasamos de maravilla.

—Aquí hay zorro encerrado, ninguno de los dos se soporta así que eso es imposible —pensó de nuevo el joven, el sudor comenzó a bajarle por la nuca— ¿Y Kurama?

—Oh, él está aquí —señaló inocentemente detrás de su espalda.

Naruto se inclino ligeramente, sin moverse del sitio, y pudo ver cómo detrás de su mujer se encontraba el que era su bijuu y amigo. Estaba sentado tieso como una estatua, con la barbilla en alto, las ojeras hacia abajo y una mirada que le suplicaba por ayuda.

—Estuve enseñándole unos trucos entre tanto llegabas —se encogió de hombros Sakura— quien diría que podías ser tan obediente, ¿verdad Ku-ra-ma? —canturreo ella al final.

—¡Hai!

—Y también sabe sentarse, tumbarse, dar la pata, rodar y hacer sus necesidades afuera —enumeró la rosa— ¡¿No es genial?!

Naruto vio sorprendió cómo el indomable demonio había sido adiestrado por un demonio incluso peor, su Sakura-chan.

—S..si, supongo.

Intento dar una sonrisa, pero era imposible con Kurama viéndolo tan fijamente.

Pidiéndole ayuda a gritos con la mirada.

—Además decidí que a partir de ahora dormirá en el jardín, en su caseta de perro —agitó distraídamente la fusta— estoy cansada de que me tenga la alfombra llena de pelos.

—¿Tenemos caseta de perro?

—No, pero tú la construirás.

—¿Yo?

—Si, tú —lo apunto amenazante con el arma de azote haciendo que el hombre retrocediese asustado— y aprovecha de hacerla muy grande porque a partir de ahora tú dormirás con el afuera.

—¿¡HEEEE?! —exclamó el rubio—¡Pero Sakura-chaaaan...!

—Pero nada —lo corto ella entretanto se dirigía fuera del salón y le lanzaba al rubio la fusta a las manos— Quizás así aprendas de disciplina y dejes de ser tan baka.

Y se fue de allí, dejando a un Kurama aliviado momentáneamente y a un Naruto consternado.

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—Mamá hoy llueve mucho

—Parece que será una noche lluviosa Shina-chan —opinó su madre— habrá que cerrar todas las ventanas para que no entre el agua.

—Mamá ¿por cuanto más dormirá papá en la casita de Kurama? —le pregunto esta vez el niño, viendo a través de la ventana como su padre y Kurama se encontraban dentro de la caseta temblando de frío —Parecen algo incomodos.

Sakura río bajito— Quizás cuando aprenda a comportarse como una mascota de verdad.

—¿Papa o Kurama?

—Ambos cariño, ambos.

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Holaaa holaaa!♥️

Yo de nuevo por aquí con POR FIIIIN LA ÚLTIMA PARTE!😁

Uff me costó he jeje😅