las historias de anyelik [backup] (corrigiendo)

pokecuento - gardevoir... si tu fueras real

Alejandro jugaba a su pokemon esmeralda super viciado.

Era su juego favorito de siempre, pero no por la historia, ni por ser mejor que los nuevos juegos, si no por un único pokemon, ella, esa gardevoir llamada Anyelik.

Aun recuerda la primera vez que jugó a ese juego.

Estaba ayudando a Blasco, el personaje de pelo verde claro a capturar su primer pokemon, y allí vio a ralts, le pareció un pokemon super curioso con un diseño muy peculiar, fue mas bien su diseño lo que le llamó la atención.

El por aquel entonces no estaba muy enterado de los nuevos pokemon que habia en esa generación, pues vivía con sus abuelos y no le querían poner internet porque decían que era muy caro, su abuelo era un agarrao de primera.

Siempre se acababa enterando de un juego nuevo por las revistas que compraba, con la paga que le daban al mes poquito a poco ahorraba y por fin se compró ese ansiado juego, ya que no pudo comprar ni el rubi ni el zafiro, pues mejor el esmeralda, mereció la pena esperar.

Allí vio a esa ralts, estuvo como un cuarto de hora para que apareciese, esta era hembra, por eso la llamó anyelik, era como un pequeño angel, solo sabia gruñido, así que entrenarla costó bastante, cambiando de pokemon a su combusken cada dos por tres, hasta que ella aprendió confusión.

Despues de aquello, esa tierna pokemon barria con cualquiera que se le pusiese por delante, su buen ataque especial era la polla hablando claro, hasta que llegó a su ultima evolución, una chica de cabello corto y verde con un vestido.

Le resultó curioso ese pokemon, parecía mas una chica que un pokemon, estos nuevos diseños eran la leche, blaziken era de los mejores que habia visto, pero esa gardevoir, esa era la mejor, poco a poco mas obsesionado con ella, como podia ser, era un simple dato indexado en un cartucho de consola estaba enamorado de ella, no podia ser.

En clase, de nuevo una chica le habia rechazado, porque, nadie le quería, era un chico delgado de pelo negro y despeinado, ojos azules de 17 años.

No es que fuera feo, en verdad, era un chico mono, pero era algo reservado, no era popular, ademas, vistiendo no tenia estilo, pues era su abuela quien le compraba la ropa.

El lloraba mientras jugaba.

<voice>

porque narices todo me sale mal, no pido nada, es mas, ni para mi cumpleaños pido regalo, lo único que deseo es que alguien me ame, solo eso joder.

Pero, tu siempre estas aquí, mi amada gardevoir, mi anyelik, tu nunca me fallas, eres mi mejor amiga, si fueses real, te daría todo el amor que guardo dentro.

Pues, debes saber que te amo, me da igual que no seas real.

Asi es el amor, rompe barreras.

<voice>

Un par de lagrimas cayeron sobre la pantalla de la consola en pleno combate de gardevoir contra un triatleta que corria cerca de la guardería pokemon.

<voice>

Te amo anyelik, ojala fueses real.

<voice>

Despues de terminar el combate el guardó su partida y se fue a acostar en su cama, solo, como siempre, deseaba que esa gardevoir lo abrazase por la espalda.

A la mañana siguiente Alejandro estaba sudando del calor medio abriendo los ojos mirando la poca luz que se colaba por los agujeros de la persiana, cuando de pronto al ir a girarse no gritó mas porque su garganta no daba mas de si, allí a su lado estaba esa gardevoir dormida, esta al oir su grito despertó, se incorporó restregando su mano en su ojito derecho mientras que la manga de su vestido se deslizaba suavemente por su hombro.