Un Día Para Sobrevivir [Completa]

Capítulo 10

Los zombis parecían oler nuestra presencia pero no lograban ubicarnos.
Estoy examinando todo, la entrada, los vidrios gigantes para observar por dentro, y un cayejon que está a lado izquierdo entre el centro comercial y una cafetería, quisiera entrar y comer algo pero sería arriesgado, y necesitamos armas para protegernos, éste centro comercial es de dos pisos y grande, obvio debe estar algo que nos ayude junto con una buena ropa nueva.

—Ahora que? —pregunta Daphne.

Me quedé pensando unos segundos y pensé en una idea.

—Que tal si, hacemos que se vayan?

Las dos se me quedaron viendo como cara de "que idiota eres" Y Key se puso la mano en la cara como señal de que dije una estupidez.

—Aver, y como carajos lograremos hacer que esos zombis ambientos no nos maten? —dijo Key con un tono de tolerancia.

—Podemos usar a Daphne de reen.

Daphne entrecerro sus ojos lanzandome una mirada asesina.

—Y por qué mierda yo?

—Eres delgada y rápida, yo no soy muy bueno corriendo y aparte tu eras parte de las chicas de atletismo y Key solo sabe correr como loca.

—Yo? Correr como loca? Ahora si te llegó la mie —Daphne nos interrumpió.

—Callense! Si hacemos mucho ruido seremos carne fresca y fin. Jeff tu sabes correr mucho mejor que yo, pero quiero hacer algo de ayuda ya me cansé de no hacer nada estos días. Iré yo, solo dime que tengo que hacer.

Sonó muy tonto sobre cansarse sin hacer nada pero era la verdad.

—Corre hacia la calle derecha de allá —le señale con mi dedo —. Ellos te seguirán muy rápido y tienes que darle vuelta a esos departamentos cuando llegues de nuevo hacia acá estaremos yo y Key dentro de el centro comercial, tu llegas corriendo y cerramos las puertas que están para protegerlo por la noche. Entendiste?

—Si, está bien. Cuídense.

—Tu igual —dijo Key y la abrazó.

Ella tomó una gran bocanada de aire y empezó a correr, hizo mucho ruido y los zombis al instante la siguieron con un perro por sus croquetas.

Yo y Key corrimos hacia las puertas de cristal y estaba bajando las puertas de acero, pasaron segundos y gracias a Dios Daphne ya venía corriendo por su vida.
Key le hacía señales de que entrara y yo sostenía la puerta para bajarla en un segundo.
Daphne se arrojó a el suelo y solté la puerta callendo a el suelo y los zombis pegaban junto a ella. Puse las cerraduras y quedó todo bien, solo con ruidos de que los zombis aún tenían la esperanza de entrar.

—Estas bien? —dijo Key con preocupación.

—Nunca había corrido tanto como hoy, mi corazón está apunto de explotar.

—Vamos, tenemos que buscar provisiones —le dije a Daphne dándole mi mano para que se pusiera de pie.

Ella respondió al instante y comenzamos a caminar y observar todo el lugar.

Había buena ventilación y era como si el centro comercial estuviera abierto pero sin gente.

La fuente de a medias estaba apagada y las sillas de madera al rededor de ésta estaban en desórden y el suelo con mucha sangre.

Abajo era la zona de la cafetería, Starbucks y a medias de estos dos una sala de cine.

—Vamos a comer algo sii? —comentó Daphne con esperanza de encontrar comida.

—Está bien, la cafetería o Starbucks? —le respondió Key como si fuera un día normal en el que salíamos a comer algo saliendo de la escuela, extraño esos tiempos.

—Cafetería, Starbucks es caro—añadió Daphne con un tono sarcastico y los tres nos reímos.

Entramos a la cafetería y observamos que todo estaba limpio, solo papeles en el suelo pero nada de sangre o cosas rotas.

—Miren chicos! — gritó Daphne de la emoción.

—Que pasa?

Nos señalo con su dedos las donas que se veían por el cristal para escoger que llevar y se veían deliciosas.

Key tomó tres donas de chocolate, Daphne dos de azúcar y yo dos de cada uno de ellas.

Nos sentamos en una mesa y con las servilletas que estaban a medias las usamos como platos para ponerlas en un lugar limpio.

Pasaron los minutos y terminamos los tres de comer, eran las donas más deliciosas que había probado.

—Hace falta algo para bajarlo bien al estómago—dijo Daphne

—Iré a buscar algo para tomar —les dije y me dirigí a el puesto de enfrete y abrí un refrigerador, al parecer había una botella de leche y no dice en sacarla —. Oigan!

Levanté la botella de leche ysus rostros se iluminaron.

Tomé tres vasos de vidrio y los llevé hasta la mesa donde estábamos.

Serví los tres vasos y empezamos a tomar algo para bajarlo bien al estómago.

—Es lo mejor que eh comido estos días encerio —Dijo Key y nos reímos todos.

—Vaya, extraño comer hamburguesas cuando salíamos de la escuela. Que viejos tiempos.

—Solo an pasado unos días.

—Lo sé, pero es como si todo ya fuera historia.

—No recordemos cosas triste, enfoquemonos en hoy y ya, vamos arriba a buscar provisiones y un lugar en donde pasar la noche —les dije yDaphne me dió una sonrisa cerrada y un poco triste.

—Vamos, busquemos ropa nueva, estos jeans me están volviendo loca —añadió Daphne y encerio que se veían como muchísima tierra y polvo casí para romperse.

Nos dirigimos a el segundo piso subiendo las escaleras que eran electricas a lado de Starbucks. Subíamos de una por una hasta llegar, observé el techo y la gran esfera de cristal que salió de el centro comercial era hermosa y alumbraba todo este lugar. Enfrente de nosotros estaba una tienda de collares y accesorios y seguimos en busca de ropa y armas.

Caminamos por la izquierda y en frente de nosotros había otra fuente pequeña y al rededor sillas iguales a las de abajo y arbustos grandes como decoración. A la izquierda estaban los baños y a la derecha más tiendas grandes.

De pronto una voz se escuchó y recorrió todo el pasillo, nos escondimos en la esquina para ir a la derecha y llegar a las demas tiendas, estábamos pegados a la pared son saber que hacer.

—Hola? Hay alguien allí?

Y recordé la voz, era Zaid.

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Heeey holaa! Espero les guste este capítulo y gracias por su apoyo, llegamos a las mil lecturas y eso es genial!
VOTEN es gratis! No sean lectores fantasma.

Nos leemos luego.

A.R