Capítulo 17

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Hace unas horas salimos de ese infierno que empezó arder.
Ahora, se nos acabó la gasolina, paramos en una tienda pequeña, estába anocheciendo y teníamos que buscar un lugar para dormir.

Bajamos los tres y observabamos todo alrededor.

—Bien, entremos, pero sean precavidos. Tomen esto.

La chica le lanzó un machete a Key y ella lo alcanzó a sujetar bien.
Yo traía un bat que estába atrás de los asientos y la chica una metralleta con mucha munición.

—Si sale un zombi ni duden en atacar.

Asentimos los dos y la chica entró primero.
Nos dió una señal con la mano para que nos quedemos donde estamos y a los segundos señaló que siguieramos.

El lugar era pequeño, los estantes de comida estaban casi vacíos, y en suelo había sangre y cristales rotos.

Enfrente de nosotros estába el despacho y había sangre al igual.

—Chicos, al fondo hay una puerta, entraré primero yo, ustedes quédense aquí.

Hicimos caso.

Mirábamos a el rededor y en eso se escuchó un gran ruido del lado de Key.
Era un zombi que se le dejó ir a la chica.

—Cuidado!! —gritó Key.

Al mismo tiempo ella impulsó el machete a él y dió directo en el cuello casi cortándole la cabeza.
El zombi quedó en el suelo y se retorcia, aún estába vivo por el pedazo que le quedaba pegado a su cuerpo.
No dudé en usar el bat y di un gran y fuerte golpe en la cabeza en éste.
Al instante dejó de moverse y solo brotaba sangre de todos lados.

—Gracias chicos —dijo la chica dándonos una sonrisa de alivio.

Todo está muy oscuro, no hay mucha luz más que la de la luna que dejaba observar un poco el lugar.

Salió de repente la chica cuando entró a la puerta y su expresión no era de alegría, era de espanto.

—Oigan, vengan a ver esto.

Nos dirigimos rápidamente hacia ella y observamos lo que había dentro de ese lugar.

Era como una tipo habitación, tenía dos camas pegadas a la pared, había sangre por todos lados, pero lo peor era ver algo que no me lo creía.
Era la señora Withe, no me lo podía creer, estába encadenada del cuello y de las manos a la pared, solo estando allí nosotros notando nuestra presencia quería asesinarnos, esa señora debió haber estado con mi madre, y lo que me reuso a pensar es que tal vez, pero tal vez mi madre fué contagiada.

—No, no creo esto! No!!

Estába tan furioso, me llegaba a la mente que estaría solo, se fué Emma, ahora... Ahora creo que se fué mamá.

—Es la señora White no? —dijo Key suponiendo.

—Sí! Sí es ella! Mierda! —grité.

Miré el bat y pensé en sacar toda mi furia.
Lo sujete bien y solté un fuerte golpe a el rostro de la señora White, que ahora, ya no es la misma.

—Qué éstas haciendo? Cálmate Jeff! —gritaba Key y yo solo seguía, golpe por golpe y aún seguía de pie ella.

—No es nadie ahora! No es la señora White que conocíamos, ella ya no es la amiga de mi madre ahora! Quiero estar solo.

—Vámonos Key —dijo la chica.

Escuché sus pasos al salir y la puerta la dejaron abierta.

Un Día Para Sobrevivir [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora