Capítulo 23

151 25 4
                                    


Sé que me veía como un tonto, pero la verdad, saber que mamá vivía, que podía estar en algún lugar de mundo y poder escucharla, era algo maravilloso.

—¡¡¡Jeff!!!  —escuché gritar de la emoción a mamá y yo solo sonreía.

Key estába alado mío al igual Audrey, Greg seguía comiendo pero mucho más rápido, en cambio Wen, ella se lo tomaba con calma.

—¿Éstas bien? ¡¡Dime!! —estába preocupado y contento, ansiaba las ganas cada vez de hablar con ella.

—Si si si, estoy bien, estoy con unas personas, estamos en una cafetería, Lake City, así se llama el lugar, dime ¿Éstas bien tú?

Lake City, puede ser que Greg sepa donde es ese lugar, preguntaré.

—Si, claro, espera —separé el teléfono de mí y lo tapaba con mi mano—. Greg, sabes donde es Lake City?

Asintió y se puso de pie para venir con nosotros.

—Sí, es algo como una plaza, donde alrededores hay muchas tiendas y esas cosas, pero está a... No sé, treinta minutos? Creo.

—Puedes llevarnos? Mi madre está allí.

—Tengo un auto, podemos ir, pero debe ser ahora, al atardecer tenemos más riesgos de ver zombis por estos rumbos.

—Okay okay —volví al teléfono —. Mamá? Iremos para allá, solo quédate allí.

—No te preocupes, Daphne viene, eso creo.

—Qué? Te que hablas? —Key me miraba confundida al igual que Audrey y muy preocupada.

—Sí, la estoy viendo, estoy en el techo, puedo ver todo, y Daphne viene arriba de una camioneta grande con más personas —silencio —. ¡Daphne! ¡Aquí!

—¡No mamá! Huye de allí ahora, lárgate de ese lugar!

—Pero que dices? Iré con ustedes, todo estará bien.

—No mamá, ella no está con nosotros, solo vete de allí ahora, corre por tu vida.

—Espera, no está con ustedes?

—¡Corre maldita sea ya!

—No colgaré, ahora vuelvo.

Escuché pasos y ruidos, alcancé a oír la camioneta llegar, puse el teléfono en frente de todos nosotros y en alta voz.

—Daphne está donde está mi madre.

—Oh por Dios Jeff, sabes lo que le hará, no?

—Lo sé, dijo que no colgaría, cuando saliera del lugar hiba a contestar, solo esperemos.

Bajó la mirada Key, Audrey me apretó el brazo en forma de cariño, el teléfono seguía en línea con la llamada, pero no se escuchaba nada.

Derrepente se escuchó como si quebraran un cristal, el ruido hizo brincar a Key, escuchamos gente gritando y corriendo.

¡¡¡Huyan todos de aquí ya!!!

Podía escuchar decir a mamá.

Luego de eso escuchamos disparos, gente gritando aún más, Key se tapaba la boca nostalgica y temerosa.

—Debemos ir ya, el tiempo tal vez se nos pueda acabar —comentó Key.

—Es de vida o muerte, si llegamos allí, tal vez sigan, no creo que se vallan por un buen rato, y nos entregaríamos fácilmente a ellos —respondió al instante Greg.

La voz de una persona agitada se podía escuchar, tal vez era mamá, no lo sé, tantos ruidos que oía me confundían.

Heeey! La encontré!

Gritó un hombre, luego un disparo se escuchó, oímos un fuerte golpe, mierda, es mamá.

—Oh por Dios —habló Audrey asustada.

Pasos se escuchaban más cerca, la respiración de mamá estába súper agitada.

—Por favor no me hagas daño, por favor, tengo un hijo no me hagas daño.

—Qué no son dos?, no?

—Déjenme, por favor, no me hagas daño te lo pido.

—Qué es esto? Eh?

El teléfono lo tomó el hombre y mamá solo lo pedía con suplica.

—Devuelvelo, encerio, por favor, te lo pido.

—Cállate! —escuchamos un gran ruido mamá soltó un gran gritó y luego no escuchamos nada —. Con que una llamada eh?

—¡¡Deja a mi madre maldita sea hijo de perra!! —le grité furioso, estába súper enojado, Key solo brincó de nuevo y salió directo al baño.

—Oh, Jeff? La jefa quiere hablarte un rato, también fué un gusto conocerte idiota.

Pasaron segundos, escuchamos pasos y al final la voz femenina de Daphne llegó a nuestros oídos.

—Jeff, hola?! Bueno, solo quiero dejarte en claro que, en una hora exacta, si no vienes aquí, ya sabes lo que le pasará a tu estúpida y jodida madre, te necesito, bueno, a tí y a Audrey, tu hermanita se está poniendo sus moños. Bueno, tienes una hora.

Colgó la llamada.

—Por qué mierda me necesita? —preguntó Audrey confundida y pensando en una respuesta.

—Me pregunto lo mismo, mierda, ahora tiene a mamá, que hago.

—Iremos, no dejaré que le pase algo a tu madre, yo perdí a alguien muy importante... No quiero que te pase lo mismo. Iré a llenar el tanque y traer armas por si se ponen de llorones.

Salió por la puerta y me quedé con Audrey sentados en el sofá.

—¡Mierda! Porqué no me hizo caso con un carajo.

—Jeff, tranquilo, iremos, estará bien, lo bueno de esto, solo lo bueno, podrás verla al fin.
 
Audrey tenía razón, lo único bueno era poder al fin verla, verla viva y no.. Bueno, muerta o contagiada.

Key aún seguía en el baño, la puerta estába abierta y me preguntaba que le pasaba.
Me dirigí a esta, abrí la puerta y la ví sentada en el retrete. Se limpiaba las lágrimas al instante de ver mi presencia.

—Lo siento, yo, solo.

—No te preocupes, estoy bien —contestaba Key con la voz casi quebrantada.

—Yo sé que algo pasa, dimelo, no sabes mentir —sonrió ella.

—Solo, si algo más le hubiera pasado Jeff imaginate, tu sabes que tu madre está viva pero, yo, yo no tengo a nadie, no sé que pasó con ellos, no sé nada —comenzó a llorar por lo que cerré la puerta y me puse en cuclillas para verla cara a cara desde ese ángulo y la abracé.

—Tranquila, lo siento, encerio, no es culpa tuya, mirame —la separé de mi y le limpie las lágrimas con mis dedos pulgares —. Todo estará bien, estoy yo contigo, y somos tú y yo, yo estoy para tí, y eso nunca lo olvides.

Ella sonrió volvió a abrazarme, le di un beso en la cabeza y podía sentir que ella confiaba en mí y que por primera vez, alguien me necesitaba para apoyarlo.

Nota de Autor:

Perdón por estar ausente por un largo tiempo. Solo discúlpenme, tuve algunos inconvenientes y ahora ya está todo bien, les traeré más capítulo más seguido, solo les pido una gran disculpa.

A.R

Un Día Para Sobrevivir [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora