En medio del pasillo se había desatado una batalla entre el divino y el pelirrojo, las indirectas entre ambos eran cada vez más fuertes, me sentía incómodo entre aquella discusión.
-Jack, luego hablamos, no sigas discutiendo en vano –le dije con tono intranquilo mientras este le gritaba a Damián-
Jack perdió sus casillas cuando el divino le dijo que mejor se fuera a casa a llorar ya que aquí se veía muy ridículo haciéndolo en el pasillo.
-Claro, ahora defiendes a tu nuevo amiguito mientras que olvidas al otro. Que divertido –miro con ironía a ambos-... Ahora te gusta apoyar a los bastardos adinerados como él.
-¡Yo no fui quien se olvidó de su mejor amigo y lo abandono sin decir ni una palabra! –conteste enfurecido-
El pelirrojo sonrió de medio lado y dispuesto a responderme aquella pregunta esté solo callo y decidió evadirla descaradamente.
-Si lo hiciste, o te olvidaste de nuestra amiga a la cual no fuiste a ver nunca más –al decir esto su mirada cambio-. Acaso eso tampoco se considera abandono y ser mal amigo.
Mi cuerpo se quedó inmóvil y una sensación fría recorrió toda mi espalda, Jack solamente tuvo que nombrarla a ella para que yo sintiera miedo o inestabilidad emocional, sabía perfectamente cuál era mi punto débil.
-Eres un maldito hijo de puta –dije entre dientes para luego empujarlo he irme-
La situación había cambiado abruptamente, Jack dijo cosas que eran de hace años, heridas que aún no habían cicatrizado del todo y que volvieron a abrirse con las duras palabras que rebosaron. Tenía acumulada muchas emociones que se me escapaban como aire pesado dentro de mi boca, mi garganta ya hacía aun nudo, listo para lograr estallar, respire hondo para tranquilizarme y estar despejado de aquellos pensamientos.
Salí del edificio y me senté en las escaleras con las manos en la cara, temía lo peor para entonces, no quería que Jack se acercase a mi pidiéndome disculpas luego de lo que ha dicho, siempre que aparecía él era un signo de mal augurio, no entendía como nuestra conexión había cambiado tanto luego de que el desapareciera, nuestra amistad cambio, el cambio y yo también lo hice. Entre tanto estar en mis pensamientos no me percate de la presencia del divino que estaba sentado junto a mi mirando a sus alrededores, su mirada gentil se posó en mi cara cuidadosamente para que pudiera confiar con él.
-¿Te encuentras bien? –expreso sin temor alguno-
-Si... bueno, en realidad no –admití-
-Cuéntame si quieres, no te forzare a contarme si no quieres.
Me tome un tiempo para pensar las cosas y ordenar mis pensamientos, si lograba contárselo podría sentir un alivio. Esto llevaba años en mi corazón, era una astilla muy dolorosa que nunca a he logrado superar y nunca tuve el valor de contárselo a alguien que no fuera Jack. Luego de pensarlo tanto, encontré que lo correcto era decirle lo sucedido.
-Había una niña que se llamaba Katy, era una gran amiga mía, siempre íbamos a todos lados para divertirnos o a conversar, en fin, éramos muy cercanos. Pero un día Katy discutió conmigo ya que su comportamiento cambio completamente de la noche para la mañana, dijo cosas hirientes sobre mi familia y mi persona, esto fue un choque repentino ya que desde ese día nos separamos y no volví a saber de ella luego de 4 meses. –me agarre ambos codos y respire profundo-
-¿Y qué le sucedió a ella? –Pregunto con preocupante seriedad-
- La volví a ver, pero ya no estaba físicamente... Los padres contactaron conmigo en ese tiempo para darme la noticia de que un auto había atropellado a Katy, esto fue un golpe muy fuerte para mi hasta el día de hoy que me cuesta asimilarlo del todo... -mi voz se entre corto un poco en ese momento- Me siento mal por el hecho de que Katy tuviera ese desenlace, también por el hecho de que después de que muriera nunca la fui a ver, sus palabras me repercuten día a día el hecho del porque me quería lejos de ella. Me he visto tan solo desde entonces.
Sin pensarlo vi como el divino me toco el brazo haciendo que toda mi atención se fuera hacia él, me froto gentilmente mi brazo, haciendo que estuviera en completa tranquilidad.
-Comprendo ese sentimiento, pero solo tú puedes saber lo que estás haciendo bien y eso nadie lo puede juzgar, el hecho de que ella se alejó de ti fue oír mera decisión suya, tú no tuviste nada que ver en ello, eres perfecto y hermoso. Yo nunca me olvidaría de ti, incluso estaría siempre a tu lado si me lo permitieras.
Su mirada estaba fija en el suelo, pero en lo último que dijo, hizo que levantara la vista y se posaran sus esmeraldas en mí, como si buscara alguna zona gentil que abrazar, acariciar o intimar. Sentí una extraña sensación al ver a Damián con esas facciones tal gentil sobre este pobre chico que solo fue a lamentarse con él, todo de él era perfecto, hasta sus bellas palabras hicieron agitar mi corazón, y solo por primera vez en años sentí que volvía a ser especial para alguien.
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Donde quieras que estes te amaré (BL)
RomantikAngel un chico con múltiples problemas se ve un día abandonado por su mejor amigo de la infancia, se vio obligado a cerrarse con la gente... Pero el destino le traerá de vuelta dos sorpresas, dentro de toda historia, Angel conocerá el amor en lo que...