Capítulo 17

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Técnicamente corrí hasta la

enfermería detrás de Grover, todo el

camino solo pensé en una cosa:

"Por favor que este bien"

Al llegar abrí la puerta de un

empujón y vi a Percy sentado en la

camilla sosteniendo una venda en su

cabeza, la cual estaba casi

empapada de sangre.

Mire su camisa y esta tenía unas

gotas también. Mis piernas fallaron

y de no ser porque Grover estaba

detrás de mí y me sostuvo seguro

me hubiera caído.

Percy se levantó de inmediato

soltando el pedazo de gaza y

acercándose a mí inspeccionando

mi rostro.

-¡Annabeth!- movió mi cara para

todos lados y al final me miro a los

ojos.- ¿Estas bien?

Increíble, él es el que está

sangrando y solo me pregunta si yo

estoy bien. Me zafe de los brazos de

Grover y abrase a Percy con todas

mis fuerzas, unas pocas lágrimas

amenazaron con salir y

simplemente las deje. Ahogue un

sollozo en su hombro y lo abrace

más fuerte.

Él parecía en shock, pero al segundo

me abrazo incluso más fuerte de lo

que yo hacía con él.

Lo aleje un poco y estudie la herida,

la cual había vuelto a sangrar, hice

una mueca de disgusto y me seque

las lágrimas al ver que el corte era

un poco pequeño por suerte, estaba

un poco más arriba de su ceja

izquierda.

-Dioses…

-Ponle esto a tu novio niña, tiene un

poco de anestesia liquida, le

ayudara.

Mire a quien me había dicho eso y

me encontré con una mujer de

facciones suaves, como si fuera una

dríade o algún espíritu de la

naturaleza en la mitología, seguro

era la enfermera.

Tome las gazas que me ofrecía y las

apreté contra la herida, tenían

también alguna especie de pomada,

pero no preste atención a eso, solo a

Déjame demostrarte que puedo ser un caballeroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora