Capítulo 30

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Habían pasado 2 días, afortunadamente no me volví una depresiva come helado con el corazón destrozado como esperaba, solo me encontraba triste, probablemente un “te quiero mucho”, no es lo que esperas que te diga el chico del que estas enamorada antes de largarse al otro lado del mundo, pero para mí eso suficiente,  Willy había logrado llevado consigo mi corazón entero.  

Me había llamado justo la noche anterior, me hizo bien escuchar su voz, no hablamos mucho, solamente me dijo que estaba bien, que ya se habían instalado y antes de finalizar la llamada ese “Se que solo ha pasado un día, pero ya te extraño” logro mejorar mi estado de ánimo y poner una brillante sonrisa en mi rostro, para ser sincera me sentía bien, el estaba feliz, yo también tendría que estarlo ¿no?,  otra cosa que me ponía de buenas era que faltaban tan solo dos días para ir a Paris, siempre había querido ir, aunque solo fuéramos un día, será estupendo respirar otros aires, me entere que Rubius y Mangel también irían, con ellos seguro nos echan de Paris a las dos horas de haber llegado.

Me senté en mi balcón para admirar Madrid de noche, suspire pesadamente, me pregunte a mí misma que estaría haciendo Willy en estos momentos, tal vez estaría levantándose, sacudí mi cabeza levemente, debía de dejar de darle vueltas al asunto, Willy estaba lejos y no podía hacer nada al respecto, debía tragarme mis sentimientos, no podía vivir toda la vida presa de la tristeza, trate de calmarme a mí misma y concentrarme el estruendoso ruido proveniente de la ciudad, hundí mis manos en mi cabello y lo alborote un poco, me levante lentamente de ahí y literalmente me arrastre a la cama

La noche debo decir que fue mi peor enemiga y mis sueños fueron sus armas, me levante alarmada trate de recobrar la respiración, abrase mis piernas y sollocé en silencio, me era imposible recordar que había soñado, pero fuera lo que fuera, acabo con lo que quedaba de mí, el teléfono sonó de golpe, me asuste y pegue un pequeño brinco, lo tome rápidamente y conteste

-Buenos días.- dijo una voz al otro lado de la línea

-Willy?.-susurre, sentía un nudo en mi garganta

-¿Estas bien?.-sonaba preocupado

-Sí, si solo tuve un mal sueño.-dije con voz temblorosa, por alguna razón no quería que parara de hablar, me sentía bien cuando hablaba

-¿Un mal sueño?, no tienes nada que temer, ¿de acuerdo?

-Sí, gracias.-susurre tímidamente

-¿Aun estabas dormida?.-agrego con un tono más alegre

-Willy son las 4:30.-dije mientras miraba el reloj de pared

-Me cago en todo, hice mal mis cálculos, lo siento.-me rei ante su comentario, no sé cómo siempre lograba sacarme una sonrisa

-No te preocupes, me agrada escucharte

-A mí también bonita

Sonreí inmediatamente, lo necesitaba, quería en ese momento que estuviera conmigo, quería revivir esos tiernos besos en la mejilla cada vez que se iba, quería abrazarlo y embriagarme con el olor de su perfume, lo necesitaba, ahora mas que nunca sentía muy dentro de mi ese rencor como en un principio, ¿cómo rayos me había hecho dependiente a él?, maldita sea mi suerte.

Comienza el maraton, tal vez seran dos capítulos mas,las amo demasiado mil millones de gracias por los votos y su comentarios! *Tacos para todas*

¡Demonios!Me enamore (Willyrex & tu) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora