Sana no sabía mucho del amor, sus experiencias hasta el momento habían sido únicamente sexuales. Jamás se imaginó que una chica que conoció por Internet le enseñaría todo acerca de amar... Y todo acerca de sufrir.
TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS, PROH...
El timbre de su departamento sonó temprano en la mañana, era JinSoul, quien traía un rostro enfadado.
Entró al departamento, demandando saber donde se había metido Sana y qué le había sucedido, ayer nunca llegó a la tienda y no le respondió los mensajes, incluso eliminó las fotos de Instagram que tenían juntas. JinSoul estaba indignada.
Buscaba una explicación, sin embargo, no obtuvo nada más que lágrimas y balbuceos incoherentes de parte de Sana. La rubia, se preocupó al instante y obligó a Sana que se recostara. Intentó de todo, abrazos, cariños, ofrecerle agua.
Nada sirvió.
Tuvo que esperar a que la castaña se durmiera y se quedó allí toda la noche esperando a que despertara.
A la mañana siguiente, bastante temprano, Sana abrió sus ojos encontrando a JinSoul a su lado. Otra vez sintió esas inmensas ganas de llorar, pero de nada le servía.
Llorar no le traería el amor de Tzuyu.
Ni tampoco el amor de nadie.
Dejó su cabeza descansar en el hombro de la rubia y se mantuvo en esa posición hasta que JinSoul mostró señales de estar despertándose.
Cuando las dos estuvieron en todos sus sentidos. Se miraron mutuamente y fue JinSoul, quien decidió romper el silencio.
-Te conozco hace solo unas semanas, Sana, pero... Realmente me has cautivado. Quiero estar a tu lado y ayudarte, pero no puedo si no me dices que sucede contigo.-comenzó a decir-Esta no es la primera vez que te veo llorar.
Sana apartó la mirada.
-No he tenido la mejor de las suertes en el amor, JinSoul.-dejó salir Sana con una triste mueca.
-¿Eso que quiere decir? -preguntó JinSoul, confundida.
-Hay una chica.
JinSoul dejó salir un suave "Oh" y bajó la mirada hacia sus manos. Eso la había lastimado un poco, debido a los crecientes sentimientos que tenía por la japonesa. Todas las noches y días que había pasado a su lado habían sido de lo mejor, nunca ha sentido una atracción tan grande por alguien a quien apenas conocía.
-¿Qué pasa con ella? ¿Te gusta y no te corresponde? -preguntó la rubia.
-Es mucho más que eso... Mucho más profundo.-murmuró Sana
-¿Y eso quiere decir?
-Creo que la amo. No lo sé, nunca he sentido algo así... -JinSoul asintió.
-Entiendo.-murmuró, tomó las manos de Sana entre las suyas-Cuéntame más sobre ella.
Y así transcurrió el día, Sana le contó todo a JinSoul, cada detalle desde el día que conoció a Tzuyu. Para el final de la tarde, ambas decidieron salir a tomar algo y JinSoul hizo algo inesperado.
-¿Hola?
-¿Hablo con Chou Tzuyu? -susurró JinSoul, para que Sana no fuera capaz de escuchar.
-Eeeh, sí.-respondió la taiwanesa confundida.
-Hola, lamento llamarte así, soy amiga de Sana y necesito pedirte algo importante.
Minutos más tarde, la llamada finalizó y JinSoul llamó a su hermano, quien ahora estaba con Taehyung en Osaka.
-Sé que es un favor muy grande, pero por favor, asegúrate que Tzuyu llegue al aeropuerto segura. Es joven y es primera vez que viaja en Japón. -le pidió JinSoul a su hermano.
-Ugh, está bien niña. Te llamo cuando la vea, adiós.-se despidió Hoseok.
Cuando la noche cayó, JinSoul acompañó a Sana a su departamento.
-Llámame si algo sucede, ¿si? -la rubia atrapó a Sana entre sus brazos-Te quiero mucho, unnie. Quiero que seas feliz...
Sana no comprendió las palabras de JinSoul en aquel entonces, pero se las agradeció de todas formas y se fue a dormir sintiéndose querida. Cuando despertó en la mañana, sintió golpes en su puerta, fue a abrir pensando que era su nueva amiga coreana otra vez, pero por poco cae al ver a Chou Tzuyu frente a ella.
La menor saltó hacia ella en un abrazo. Y los corazones de ambas rebosaron en felicidad, una felicidad que, lamentablemente, no dudaría por mucho.
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n/a: quedan 6 capítulos.
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