Einar sabía que Loki era posesivo, pero jamás pensó que aumentaría esa costumbre de aquella manera exagerada. Ahora él iba siempre al lado de Loki, podía opinar respecto a sus decisiones como presidente, y usualmente el príncipe se sentaba en sus piernas, como diciéndole al mundo "¿ven a este hombre? Pues es mío". Mentiría si dijera que le molesta, porque ahora además de esta intensa característica, él también es bastante cariñoso y para gracia de Einar, también muy ardiente. Es muy común que Loki busque los labios ajenos, y más común todavía que se moleste con él por no querer llegar a más, ¿por qué nadie le advirtió que Loki era así de "sexual"? No era como si se quejara, pero sentía que si se dejaba Loki podría obligarlo a follar hasta en los parques, y eso que todavía él no prueba el sexo, acaso no se suponía que los jóvenes aún puros siempre están cuidándose, con temor y todas esas cosas de vírgenes; pero Loki era distinto, él podía intentar arrancarle la camisa estando en el castillo y luego frente a Thor aparentar ser la cosita más inocente de la vida, definitivamente nadie le creería si dijera que el príncipe de dulce niño no tenía nada.
Su equipo de presidencia y el club de populares han tenido que acostumbrarse a las opiniones continuas de Einar, incluso el vicepresidente cree que lo han destituido indirectamente, mas no dice nada porque todo el estudiantado sabe que es totalmente estúpido pelear en contra de Loki y su novio el salvaje guerrero. Justo están el equipo de presidencia y los miembros del club decidiendo que tema debe llevar el baile de despedida.
— Ein, ¿qué piensas? — preguntó el príncipe sentado sobre él, mientras dejaba que el muchacho le acariciara el cabello.
— No lo sé, bonito. No había pensado en eso — dijo, y empezó a pasar las manos por los párpados ajenos. Entonces Loki lo supo, ¡la respuesta era misterio!
— Lo tengo, muchachos — anunció poniéndose de pie — haremos un baile de estilo victoriano con antifaces.
El equipo de presidencia y el club estuvieron de acuerdo y después de que Loki fuera a presentar la idea ante la directora y ella la aprobara, él y sus muchachos se encargaron de colocar un cartel de información.
Los estudiantes se amontonaron junto a ellos para ser los primeros en conocer el tema del gran baile; era el evento que esperaban desde que ingresaban al instituto, pues daba la despedida a su época de secundaria, era la noche en que miles de promesas sobre ser amigos por siempre se hacían; era simplemente una mágica noche. Para suerte de ellos, los estudiantes aceptaron bastante bien la idea, incluso los miembros de otros clubes estaban felices con la decisión. Ahora solo faltaba empezar a hacer los preparativos.
Loki salió a como pudo del tumulto de personas para poder ir al parque un rato y como era normal, Einar lo tomó de la mano para caminar juntos.
— Hola, Thor — saludó respondiendo una llamada — bien... Sí, con Ein... ¿qué cosa?.. Ah, ya veo... No pasa nada... Sí, estoy bien... Ok, te veo... Sí, igual... Que igual te amo... Bien, hasta luego.
Einar vio el gesto de intensa molestia que tenía su novio, no sabía si debía hablar o no, pero un apretón un tanto fuerte le instó a buscar respuestas.
— Bonito, ¿qué sucedió? — le preguntó, y a Loki le encantaba que él pusiera interés en sus cosas. Einar siempre había hecho aquello, pero Loki jamás se había percatado.
— Es Thor — dijo entre dientes — quiere que conozca a su prometida.
— ¿Prometida? — consultó totalmente confuso, Thor jamás les había mostrado una novia y ahora tenía una prometida.
— Dijo que ya la conocía bien y que no necesita tener un noviazgo para saber que es la indicada.
— Bueno, no te preocupes. Thor es un buen rey, y seguro que él ha elegido con sabiduría — dijo para intentar calmarlo — y bien, ¿quién será la afortunada próxima reina de Asgard?
— No sé, dijo que vendrán mañana y que pedirá que me den el día libre — respondió más tranquilo — más vale que me agrade, sino se la quito de encima en un segundo — dijo y Einar sonrió, ahí estaba su diva preferida.
