Ways to say goodbye →Kyuhyun; SJ.

Capítulo 5

El pequeño departamento poco a poco se iba llenando de testosterona coreana, iban llegando todos mis amigos, uno por uno. A decir verdad, éramos una especie de equipo, o más bien, el equipo de mi ex novio ya que yo solamente me aparecí hace unos tres años. La llegada de Yesung me había traído una grata sorpresa, venía con un ramo de flores por mi nuevo hogar.

—Escuchen todos por favor, él es mi editor Yesung, además de eso es un gran amigo mío. Tratenlo con respeto —abracé al recién llegado y lo llevé a conocer a los chicos. —Él es Ryewook, de seguro se llevarán de maravilla. Tienen bastante en común.

—Ryewook, un gusto —se dieron la mano y los abandoné para ir en busca de Heechul.

-Hee, ven. Te necesito un segundo. -caminé con el él detrás hasta llegar al cuarto de baño.

—¿Estás bien? estás algo pálida —dijo el muchacho.

Cuando me desperté esa mañana, antes de llamar a Eunhyuk, me había inquietado por un ligero retraso en mi menstruación. No le había tomado tanta importancia en un principio, hasta que logré ver las dos líneas rojas en aquel test de embarazo. Apoyé mi espalda en la fría pared de cerámica arrastrandome hasta sentir el helado suelo, no dejaba de mirar el blanco aparato que delataba mi futura vida como madre soltera. ¿Qué debía hacer? ¿Abortar? Quizás. ¿Debería decirle? No lo sé. Me armé de valor y lavé la prueba, le puse la tapa y lo guardé dentro del cajón, seguido de eso entré a la ducha. Extrañamente, aún no lloraba.

Me ponía nerviosa el hecho de no llorar, ni por la ruptura ni por mi embarazo, tal vez sea el shock.

Pasé mis manos por mi rostro para prepararme mentalmente lo que me diría Heechul cuando le mostrara mi condena de vida, abrí el cajón y saqué la delatora prueba. Su rostro era de impacto, no se le entendía muy bien lo que su rostro quería decir. Estaba anonadado.

—¿Esto es tuyo? —asentí. —Mierda. —cubrió su boca con su mano libre. —¿Es de Kyuhyun? —volví a asentir. —No me jodas. Inna —me abrazó con bastante fuerza, algo incómodo para mi.

—Aún no sé que hacer —me soltó de su agarre.

—Dime que tienes pensado.

—Abortar y no decir a nadie sobre esto o hablar con Kyuhyun y darle ambos una solución.

—Pero ¿tú quieres esto? —puso su mano en mi hombro.

—No lo sé, estoy confundida. Mi carrera...—me interrumpió.

—Tiempo que quería decirte esto Inna, pero tu carrera no lo es todo. De hecho, es tan jodidamente libre que puedes hacer un montón de cosas. Eres tú la loquita que no sabe priorizar, y creo que esto es tu karma.

—No me vengas con tus cosas del karma y alineamiento de chacras —fruncí el seño y pensé. —¿Qué pasa si no soy buena mamá?

—Claro que lo serás, además, tú y Kyuhyun son hermosos. Van a tener al hijo más guapo de todo el kínder -reí.

—Te amo, no sé que haría sin ti.

—Estarías muerta sin mi —volvió a asfixiarme. —Eres tan idiota Inna, pero me encantas.

—Gracias Hee —nos separamos. —Mañana llamaré a Kyuhyun.

La fiesta o reunión estaba bien, todos gozaban el estar juntos otra vez aunque no sea la mejor de las razones eso a ellos no les afectaba mucho ya que aún seguíamos siendo buenos amigos. Traté de no beber alcohol, pero no voy a negar que mi deseo por tomar una copa era incontrolable, ya me estaba doliendo al hígado el estar embarazada.