Will You Say Yes? [JK]

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—Aw, el bebé está enamorado.

Ese era Park JiMin, burlándose de la actual condición de su amigo, Jeon JungKook.

JungKook tomó una de las almohadas y la lanzó hacia la cara del mayor, quién al recibir el impacto sólo se limitó a quejarse y fulminar al pelinegro con la mirada.

—No es gracioso—se quejó, a lo que JiMin rió—Ugh, no sé porqué decidí contarte, sabía que no me ayudarías.

Ambos chicos se encontraban en la habitación de JiMin. Según la versión oficial, ambos estaban ocupados realizando un trabajo grupal de literatura; pero hay que ser realistas, estando juntos en un grupo, ellos harían de todo menos trabajar.

JiMin estaba sentado en su pequeño sillón reclinable con sus pies sobre su escritorio; mientras que JungKook estaba acostado sobre la cama del pelinaranja, apoyando sus largas piernas en la pared y dejando caer su cabeza en el aire.

—¿Y quién es la afortunada?—preguntó JiMin, lanzando una pequeña pelota en el aire y seguido atrapándola. Repitió esta acción un par de veces antes de que su amigo respondiera.
—Kim SunHee—dijo sonriendo.

No podía evitarlo. Sólo escuchar su nombre, sólo pronunciarlo era suficiente para traer a su mente la hermosa imagen de SunHee.

—Allí esta otra vez—dijo JiMin sacándolo de sus pensamientos—tienes esa sonrisa de bobo por toda la cara.

JiMin se levantó de su asiento y empezó a imitar de forma exagerada y con una voz fingida la desesperación del menor.

—Realmente no se que hacer, Hyung... Ella es muy linda... Quiero invitarla, pero me da miedo acercarme...

El pelinegro lo miró un poco molesto.

—Yo no hago eso—se quejó.
—Sí lo haces—le aseguró.
—Que no.
—Que sí.
—Eres odioso, Hyung—dijo finalmente.

JungKook no era el más respetuoso sus mayores, pero eso no indicaba que no se preocupara por ellos.

—¿Y tú, Hyung? ¿Ya tienes con quién ir al baile?
—Pues la verdad no—dijo con gran tranquilidad—he pensado en un par de chicas, pero no es nada serio. Por ahora soy un hombre libre y no tengo intenciones de cambiar eso pronto.

JungKook rio de su comentario, recordando lo que había dicho años atrás.

Se había prometido a sí mismo no caer en las redes de lo romántico para así poder concentrase totalmente en su música y videos; pero todo eso había cambiado cuando conoció a Kim SunHee.

Ni siquiera JungKook sabía si había sido amor a primera vista o no. Ambos siempre habían sido muy tímidos y reservados; aún así, con ella logró una conexión que nunca había logrado con nadie más. Una amistad inquebrantable, pero poco a poco JungKook fue descubriendo lo maravillosa que era esta chica y se permitió a sí mismo verla de otra forma. Justo eso lo había llevado al dilema amoroso en el que ahora estaba metido.