Kathania recibe una devastadora noticia que le cambia su mundo y la lleva a un lugar que jamas imagino donde encontrata grandes amistades que estaran siempre para ella , El amor de su vida , su mayor enemiga y un asesinato.
◇◇◇◇◇◇◇◇◇◇◇◇◇
Portada :...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
-Te voy a contar todo y entenderás el porqué de las cosas, pero tendrás que ser fuerte- la escuchaba decir muy segura de sí misma, Respiré profundo y le presté atención.
-Carlota...carlota era mi madrasta...Ella no lo sabía porque solo me vio cuando pequeña antes de mandarme con mi abuela, ella...mató a nuestros padres, quizás no lo sepas, pero Carlota se enteró que mi papá tenía un amorío con tu mama Vanessa.
-¿Qué carajo estás diciendo, jodida loca?- le grité.
-Escúchame por favor, Carlota al enterarse falsificó documentos para enviar a tu madre esa noche a que trabajara hasta tarde en la enfermería y tu padre decidido la acompañó, era inevitable el ataque, Carlota lo sabía y sucedió... la maldad de carlota no paró y en la cabaña de campaña asesinó a mi papá e hizo parecer como si lo hubiera hecho.
-No puede ser Ekaterina, no puede ser.- terminé desplomándome en el piso.
-Todo esto lo sé gracias a mi abuela, la cual recibió una carta del cómplice de Carlota...Carlos. El odioso fue quien descubrió a mi papá con tu madre y se lo contó a Carlota sin saber las consecuencias, desde entonces vive amenazado por ella y por eso nunca habla y se encuentra aquí en El Orfanato desde que ella llegó.
Ekaterina me entrega la carta que le entregó a su abuela y todo era cierto -¡No!- grité. No podía creer como viví engañada todo este tiempo, que viví con la asesina durante varios años, por eso su gran odio hacia mí – ¡Cabrona! ojalá estés ardiendo en el infierno- gritaba como loca en el ático.
-Cuando mi abuela falleció vi el momento indicado para venir aquí y hacerla pagar.
-Mi papá ¿Por qué le hiciste eso?-Ekaterina comienza a llorar como loca diciéndome que todo fue un error, ella trataba de esconder las dagas heredadas de su abuela cuando él la descubrió y al reaccionar se viró y la daga cogió su ojo pero que no era su intención.
-Jamás haría algo que te lastimara- me dijo.
Me tiré sobre ella y la abracé.
-Ambas hemos pasado por mucho. -le dije y en el piso del ático nos encontrábamos llorando. Ya cuando decidimos bajar encontramos a Juan escuchando todo, salió de las sombras y nos abrazó fuertemente.
-¿Y ahora qué? -Me preguntó Ekaterina. Ahora, se acaba todo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.