parte 10: "rescate a Snow"

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—Snow, Snow —...

En las afueras de una ciudad, en la estación de invierno.

Snow esta de frente a una mujer de pelo castaño, esvelta, con una chaqueta vaquero, y zapatos de cuero...

Era un niño, de apenas tres años.
Ella le esta hablando con énfasis, a lo que él responde:

—Si mami? —.
—Debes quedarte aquí un ratito,
iré a la esquina a ver algo.
Pronto vendrá tu tía a hacerte compañía —le indica ella —.
—No mami, yo quiero ir con vos —.
—No Snow, mama se va a la esquina a comprar algo y regresa —.
—No mami, yo quiero ir con vos,
no me dejes solo — insiste el niño
—.

—Si te quedas, mama te trae un alfajor —lo persude ella  —.
—¿Un afafor? —.
—Si —.
—Veno —.

Era una tarde de invierno, y la gran ciudad estaba gris.
Su madre se fue, dejándolo en un pórtico cerrado, en la vereda de un edificio...
Donde el viento no podía alcanzarlo.

¿Como es ser tan pequeño, tan inocente en un mundo que es gobernado por los mayores?
Tan vulnerable.

Se te es imposible, poder ser tan alto como ellos,
Y como caminan, vienen y van, sin su mamá.
Y el tiempo pasa de forma remota y lenta.

"¿Porqué cuando mama esta triste puedo sentir su tristeza?
¿Porqué siendo tan pequeño, puedo persibirlo todo?

Tal vez soy pequeño, pero puedo persibir, todo el mundo, y la ciudad entera, tal cual es."

"Como si mis sentidos fueran excesivamente poderosos,
Esa es la ventaja de ser un bebe de tres años."
.....
Huelo el aire fresco.
La gente pasa y algunos autos.
La gente se detiene, y ya no anda nadie por la calle...

"Es difícil estar sin mama, pero ya regresará.
Tengo un mal presentimiento y dudo que vuelva a tiempo y eso me trae afligido"

El niño se levanta, y va hasta la vereda, esperando ver a su mamá, pero no regresa.
Y repite esta acción varias veces.
Pero su protectora no regresa.

Tal vez solo era un ensueño,
Pero era un niño denuevo, y podía sentir el abandono, podía sentir la soledad...
Todo por ese día que se quedó solo.

Mamá no regresa.
Ya tenía que haber venido.
Pero el sueño es diferente,
exagera la espera...
Soledad, y abandono.
...
Se repite así mismo, la conversación para sentirse más acompañado:

—Mami puedo ir con vos?
no, voy acá seca, a taete un fafor —.
....
Esta es una escena de desamparo,
tal vez jamás ocurrió,
pero este recuerdo vino a Snow seguidamente.

Tal vez, alguna vez se sintió solo como un niño indefenso.
Solo, propenso al abismo del mundo.
Llovía, y su corazoncito estaba cargado de tristeza, irrefrenable, bajo la lluvia, su llamado rozando en llanto, se elevaba como una canción...

La lluvia era cada vez más agresiva, y había terminado por empaparlo.
Su carita blanca y sus enormes y brillosos ojos, esperaban en el confin de la vereda.

—Mamiii!!
Maaaaa!!
Maaaamiiiiiiii!! —.

Regreso a su banco.
Apareció una señora, que él conocía, era la vecina de donde él vivía.
Conmovida, se acercó para tranquilizarlo:

—Que pasa pequeño Snow?
 ya vendrá mama, toma unos caramelos —.
—¿Mamá vendrá pronto verdad? —
—Claro que si —.
luego vio que la señora no estaba mas.

Fue a la vereda a mojarse otra vez.
—Mamiiiiiiiii!
Ya volverá, pronto volvera —
se prometía —.

Luego se acurruco a los pies del pórtico, se subió la capucha, y seguía hablando para consolarse así mismo.

La Habitación de MarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora