—Buenos días señor— me saludo una de las empleadas que esperaban fuera del banco para que al llegar yo abriera.
—Buenos días Monica, ¿Todo bien con el bebé? — pregunté mientras insertaba las llaves en la gran puerta de vidrio.
—Todo bien gerente Coleman, recién inicia en el tercer mes— asentí y sonreí mientras abría el banco y nos adentramos, Monica, era una chica puntual, siempre ha sido puntual.
La voy a extrañar.Una vez la mañana comenzó a pasar, las labores aumentaron.
Me encontraba haciendo el los cálculos de la tasa de interés para algunos clientes que se habían atrasado en sus pagos por un préstamo, cuando un toque en la puerta me saco de mis pensamientos.
—Señor, lo busca el presidente de la compañía DKym—
—Que pase por favor— me senté en el escritorio y encendí el ordenador, cuando la puerta se abrió, un hombre de ojos azules y el cabello más que negro, me sonrió, me levanté para darle un abrazo.
—Cuando recibí tu mensaje hace unos minutos no lo podía creer. ¿Qué hace el gran Joseph Halos en esta ciudad? — susurré mientras lo invitaba a tomar asiento.
—He venido por muchas cosas y otras pocas, una de ellas es a venir a hablar contigo— me sonrió.
—Pues dime, aunque antes déjame decirte que tus años casi no se nota, creí que el Skype mentía o tenía filtro, pero vamos, tienes cuarenta y dos años y no los veo, en donde están— sonreí.
—Por Dios Dominik, no hagas drama— rodó los ojos.
—La primera es que vengo a acompañar a Noah a entregarle un trabajo tu esposo, la segunda es que… rayos, se que sonará estúpido, pero necesito un maldito consejo— levanté mi ceja y me acomodé mejor en mi silla.
—Dime, ¿Qué es lo que lo hace dudar al gran Joseph Halos? — una vez más rodó los ojos.
—No dudo…— cerró los ojos y suspiro. —Bueno, el asunto está de esta forma… —Recuerdas cuando me invitaste a tu boda y dos meses después regrese a visitarte y te conté que en el camino de regreso a casa, ¿conocí a Noah?— asentí con la cabeza. —Bueno… no te conté la verdad de como lo conocí— levanté ambas cejas.
Pero antes de hablar me interrumpió.
—Lo conocí en la calle, sí, pero no fue porque me topé con él— suspiro y se frotó el rostro varias veces.
—Esa noche que regrese a casa, mi madre me citó en un restaurante, fui y me encontré con la desagradable sorpresa de que ahí estaba una mujer, me quería emparejar con esa loca de Susan— rodé los ojos porque esa vieja loca me caía como una espina en el culo.
—Solo estuve durante la entrada, ni siquiera comí, solo bastaron unos minutos para que todo valiera mierda y me hartara, al final me largue, pero eso no es todo, mi jodido auto rápidamente fue emboscado por la perra de Susan, quería que la llevará a casa, ¿Sabes que fue lo que le dije en ese momento? — no hacía falta contestar, porque sabía que él iba a seguir.
—Le dije, “Que te lleve a casa la puta madre que te parió” y me largue de ahí. Caminando, aunque ni puta idea tenía de donde caminar. Me perdí en una jodida calle de ve a saber dónde mierdas era y ahí lo vi, una patrulla estaba afuera de un edificio que se veía demacrado, no me imagino vivir en esos departamentos, para entrar en la puerta de este, había unas escaleras pequeñas de metal y el venía siendo empujado por un oficial. No le iba a tomar tanta importancia hasta que lo empujó para que bajara y él tropezó, pero como venía esposado no pudo detenerse y cayó de las pequeñas escaleras. Mi coraje fue tanto que le grité al policía, cual era su problema, él solo dijo que se merecía eso y más, porque ese malnacido había matado a su madre y a su padre y que su madre estaba embarazada, según el oficial y los vecinos, él los envenenó, se me hacía irreal creer que ese chico flaco, pálido, con la vista perdida, hiciera eso, así que lo defendí y dije que el iba a tener a un abogado.— se pasó las manos por el cabello y suspiro.
—Llame a mi amigo Marshall, su hijo más grande es abogado y es uno de los mejores, así que sin más llegó y fue todo un lío, pero si, logró ganar… aunque ese no es el punto. Desde ese día él está agradecido conmigo y para todo me obedece, hasta el trabajo que le pidió tu esposo, lo hizo gratis, porque según él, es mi amigo, pero hace semanas que comencé a salir con Grecia, una latina que conocí en un bar, él se comporta raro, ya no es el mismo, si le digo que me acompañe a la oficina o a alguna fiesta, él solo no tiene tiempo o no tiene ganas, ya no me espera para salir a correr, ya no se acerca al maldito gimnasio, ya no se sienta en la sala a ver televisión, ya no baja a comer porque está ocupado con sus experimentos, ya no conversa conmigo como lo hacía antes y mucho menos hace acto de presencia cuando Grecia llega a casa—Sonreí y negué con la cabeza.
—Créeme que no volverá a ser el mismo mientras estés con esa Grecia— enarcó una ceja y me miro raro.
—Explícate Coleman— me encogí de hombros.
—¿Por qué no le preguntas por su amor platónico?— su cara era de total confusión. —Mejor aún, ¿Por qué no le preguntas desde cuando está enamorado de ti?— sus ojos se abrieron a más no poder.
—Eso es imposible, no hay posibilidad de que eso suceda— me comencé a carcajear y Joseph solo me miro mal —Es tan imposible como que atrapen al “Tulipán” — me sonrió.
Y solo esa palabra bastó para que recordará cuando nació el “tulipán”
Transilvania Rumania 1805 …
En realidad es broma, nunca he ido a Transilvania, pero espero hacerlo algún día.
Era un bello miércoles, en las grandes y hermosas playas de Cancún, mi novio, yo y sus amigos, habíamos venido a pasar unas agradables vacaciones de Navidad, quería deshacerme un poco del frío y disfrutar un poco más del calor.
—En serio, te vas a quedar todo rosado— hablo Holland, la única que me aprecia y acepto mi invitación a las vacaciones, ella decía que Fernanda valía mierda, que daba igual porque de todas formas ni conocía “el secreto”
—Déjame tostarme, quiero disfrutar de estas playas que no volveremos a pisar en mucho tiempo, maldito trabajo nos exprime— Hablo Caín, un rubio con un ego súper alto, pero muy buen amigo.
—Caín, tu no te tuestas, solo te estás poniendo rojo, te va a dar una maldita insolación— volvió a regañarlo Holland— Nadie te va a querer— uso su último método, pero no funcionó, Caín solo levantó la cabeza para contestar.
—No me hagas cambiar de opinión, al menos hasta que Masery me diga que no me va a querer si me pongo tostadito— Masery rodó los ojos y le mostró el dedo de en medio mientras tomaba su cerveza.
Esas indirectas de Caín para Masery comenzaron a surgir desde que en una ocasión, “según su versión” se embriagaran y se liaron, sí, con sexo y todo incluido.
Al parecer a Caín le encantó pero a Masery no, ya se imaginarán quien era el pasivo, y desde ese día Caín anda detrás de Masery.
—Pero miren a quien tenemos aquí— hablo un hombre que era desconocido para mí. Creo que en realidad era desconocido para casi todos.
—Ah, la perra de Babeth vuelve a ladrar— contestó Masery.
—Habla el hijo de puta que se meaba ante mi presencia—
—Solo fue una vez pendejo, y fue porque algo le echaste a mi bebida—
—Si, sigue lamentándote en tu miseria mientras yo me revuelco en mi dinero— le guiño un ojo y se fue con su jauría de modelos huecas que lo seguían.
—Ese pendejo lo va a lamentar, y por su maldito dinero va a llorar— susurró Masery mientras volvía a recostarse.
—Créeme cariño, apuesto a que tu tienes más dinero que él, y eres más inteligente, además Holland comenzará a trabajar— Caín le guiño un ojo.
Holland se levantó y levantó a Caín de una oreja.
—El equipo panda comenzará a trabajar cariño— hablo Holland mientras guiñaba un ojo y se dirigía con Caín arrastrándolo a algún lugar.
—El equipo búho solo esperará el aullido del lobo— mi novio le guiño el ojo y me abrazó aún más para luego besarme.
Masery solo soltó un suspiro y dejo su cerveza de lado.
—Jodidas vacaciones— susurró mientras se acercaba a su maleta y de ella extraía una mini laptop.
Al día siguiente, todos sonreíamos mientras nos pasábamos el periódico y desayunábamos.
“El ladrón ahora llamado el tulipán lo vuelve a hacer”
Con eso… ya decía todo.
Bueno, solo con saber que Babeth fue víctima de un robo a escala mayor, tienen toda la información.
—El tulipán no será atrapado por el simple hecho de que es imposible, pero en cambio, lo tuyo con Noah, es malditamente posible, créeme Joseph, muero por verte casado— él, solo soltó una carcajada.
—Por cierto, me dijeron que tus padres están en tu casa— rodé los ojos y puse cara de fastidio. —Espero no intervengan en la sorpresa de tu aniversario—
—Yo también lo espero Joseph, yo también lo espero— susurré mientras suspiraba.Solo tengo que decir que soy acosada por mis sueños para terminar esta historia, así que espero poder terminarla pronto... Al menos antes de que los pierda :/
Me voy pequeños criminales, ando un poco enferma.
Por cierto, alguien noto que ahí sale un poco del futuro de Si... Ya me callo!
Los amo ♥
![](https://img.wattpad.com/cover/124993853-288-k398750.jpg)
ESTÁS LEYENDO
C R I M I N A L
ChickLitNo confíes ni en las letras que tus ojos ven... aquí, se aplica la típica frase "Nada es lo que parece" o bien, puede ser "El que con lobos anda, a aullar se enseña" Tranquilo, pasa, la historia estará lista para contarse en breve... No temas, no...