Corazón de Piedra

Matías y Alex

Las cosas entre Marcos y yo se habían vuelto un poco complicadas, las miradas amenazadoras, las acciones hipócritas tanto de su madre como de su familia, si, de su familia... un día recibí una llamada del hermano de la madre de Marcos quien sin escrúpulos me insulto de pedófilo enfermo, pero bueno, poco basto para que se diera cuenta que no todo era como su hermana madre de Marcos se lo contaba, todo era muy diferente a lo que se decía, puesto que yo jamás le obligue a nada, lo quiero y mucho, por eso jamás le haría daño...

Mi hermano volvió, de ningún lugar por supuesto, solo dejo de ir a los entrenamientos y con él Matías, él era el típico chico al que mirabas de lejos y decías "Este chico no me caerá bien" si Matías el chico que no tiene nada de inocencia, lo cierto es que hasta cierto punto era algo fastidioso, pero poco a poco le fui conociendo las cosas empezaron a cambiar...

Ese día como cualquier otro fuimos al parque ya tarde, Matías fue por mi hermano y yo salí detrás de él, por supuesto que no quería encontrarme con Marcos pero si le prestaba demasiada importancia, alguno que otro se daría cuenta y ambos tendríamos problemas cosa que yo quería evitar a toda costa para el...

Llegamos al parque y para mi sorpresa Marcos no estaba, según los rumores su mama lo había enviado a trabajar a un rancho por las vacaciones de verano, eso me dio como aguja al pulgar, puesto que no le oiría reír en un largo tiempo, como de costumbre me senté a un lado de la portería, yo nunca jugaba a menos que les faltara un jugador a un equipo, ese día falto uno y tuve que jugar, jugaba en contra del equipo de mi hermano, Matías jugaba en su equipo de portero...

El partido acabo, no me gusta narrarlo porque muy apenas juego no me gusta en fin, se acabó el partido, ganamos 8-2 si una "goliza" según los de mi equipo, pero bueno eso a mí no me importaba, fui y me senté de lado a la portería, mientras observaba como disfrutaban la victoria...

Néstor: Alan ven, ¿no quieres coca?

En serio que esa es una pregunta muy estúpida, puesto que no bebo otra cosa que no sea coca, bueno rara vez tomo agua y uno que otro jugo de frutas.

Yo: Si

Me pare, tome un vaso me serví, y volví a sentarme donde mismo.

Eliel: Todos están hablando de ti.

Yo: ¿De mí? ¿Por qué?

Eliel: Dicen que eres veloz, un buen defensa y que tienes mucho aguante, no dejabas pasar a nadie para tirar a gol.

Yo: ¿Ah? Bien.

Matías: ¡A su corres muy rápido!

Yo: No tanto, solo un poco...

Matías: Si verdad no corres... vuelas...

Eliel: Apuesto a que les gana a todos.

Yo: No voy a correr.

Matías: A que no le ganas a Larry...

Yo: No voy a correr.

Eliel: Larry es bien presumido, siempre dice que él iba a ser jugador profesional pero que rechazo una invitación del Boca Junior...

Matías: Larry dice el hermano de Eliel que si te juega unas carreras...

Yo: Eh dicho que no voy a correr...

Larry: No me va a durar ni la salida, ni la sudada que voy a dar...

Yo: ¡Acepto!

¿Por qué acepte? Simple, odio a las personas que se vanaglorian solas y a como le vi jugando y como se movía, estaba 100% seguro que no me ganaría corriendo ya fuera de resistencia o velocidad, el perdería, acordamos jugar a dos cuadras ida y regreso...