Acto. 6.- Danza de Dragones.

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Parte. 1

En uno de los parques del pueblo se encontraba el grupo de Godou junto con el de Harutora con unos dulces fríos y raspados para quitar el calor del día de verano, aunque no era sorpresa que ya estuvieran mostrando algunas gotas debido al intenso calor de ese verano. Debido al poco espacio que había en los banco es que Erica junto a Liliana y Mio estaban sentados en una y en otro se encontraban Yuri, Ena y Hokuto mientras los varones estaban parados en medio observando a Hikari quien jugaba con María y Shizuka.

Después de haber chocado y caminado un poco hacía la tienda debido al calor excesivo es que todavía los dos grupos no se conocían en su totalidad y simplemente hablaron con suavidad, aunque Hokuto tenía su mirada fija en el joven e oscuros cabellos quien tenía un aura muy conocida para ella que la ponía sumamente alerta. Godou por su parte no había sentido el poder de Hokuto como dragón y creía que era una chica normal como Yuri y las demás, aunque si hubo seres que habían detectado el poder de la hermosa joven.

– Sin duda esto no es para nada malo – Comentó Godou con un suspiro calmado llamando la atención de los presentes – Alejar el estrés de la escuela o de los problemas que nos rodean con el aire puro del pueblo, además de la sensación de tranquilidad que invade el lugar – Godou en eso sonrió mientras recordaba todo lo que había estado viviendo durante medio año ya desde su renacer como Campione – Ojala esta paz durara para siempre – Sonrió de lado conociendo mejor que nadie esa respuesta.

– Creo que entiendo eso – Touji fue quien le dio la razón a Godou y el mismo volteó a verlo – Ya ha pasado un año más o menos desde que deje la cuidad para mudarme a este pueblo simple y aburrido y comparado con la cuidad, la paz de este lugar es increíble, casi parece que no tendrá nunca un verdadero final – Los ojos de Touji se cerraron y recordó todo lo que había vivido antes de su "accidente".

– Los delincuentes siempre se entienden – Comentó Harutora en un tono burlón y ambos chicos entendían que era por sus rasgos faciales, aunque Touji en verdad fue un delincuente en su pasado.

– Sé puede decir lo mismo de los idiotas – Touji respondió al insulto de su amigo con una sonrisa mientras Harutora frunció su ceño y las damas soltaban una risa, aunque Godou pareció no comprender eso provocando que los demás entendieran la consideración de nombrar a Godou como un idiota, tal vez más que Harutora.

El sonido de los niños jugando junto a la música creada de los pájaros y cigarras resonaba en el tranquilo ambiente rural que todos vivían, Godou termino de comer su paleta de limón y observo su paleta que contaba con unas palabras y se sorprendió un poco.

– Al parecer gane un premio – Los presentes miraron a Godou y el mismo mostró el palo de paleta y Touji silbo mientras Harutora estaba incrédulo, aunque eso llamó la atención del rey quien no sabía que estaba pasando.

– Tus antepasados sin duda te odian, Bakatora – Touji se burló de un Harutora quien cayó al suelo rendido como si le hubieran robado el alma y Godou confundido observo a Touji para preguntar qué pasaba – Las paletas que tú y Harutora compraron están dando un montón de premios que aparecen en los palitos y el mejor premio resulta ser una consola de último modelo con un juego que Harutora quiere pero no le alcanzaba, pero siempre que obtenía un palillo de victoria venía con otros códigos impresos que lo hacían invalido, pero ese código en tu palito significa que ganaste el premio mayor – Godou se sorprendió de dos cosas con la explicación de Touji.

– Entiendo – Godou observo el palito que tenía en manos y sonrió para caminar y quedar delante de Harutora quien alzó la mirada para ver a Godou, el cual le puso el palito de madera ganador frente a Harutora quien lo miro sorprendido – No soy un gran fanático de las consolas y me basto con las tres que ya tengo como regalos de la familia, así que puedes quedarte con el palillo – Harutora observo con un brillo en sus ojos a Godou quien hacía un acto de buena voluntad – Y a su vez, es un gusto conocerte, Harutora-kun – El nombrado observó al joven de negros cabellos – Al final todavía no nos hemos presentado – Comentó Godou con una sonrisa nerviosa y los presentes asintieron a ello.

The New Testament of Devil King and Fallen Queen.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora