Romance al estilo Winteriron

First Burn

💔 Inspirado en la cancion "First Burn" y "Burn" del musical Hamilton 💔

Bucky entro corriendo a la habitación pero se detuvo bruscamente al ver maletas sobre la cama matrimonial que compartía con su esposo Tony. 

  — Anthony...

 — Guarde todas las cartas que me escribiste ¿sabes?—. Escucho la voz de Tony quien estaba de rodillas junto a la chimenea que estaba en la habitación, esta estaba prendida y iluminaba el rostro cubierto de Tony, no podía verle la cara  —.  Eran recordatorios de que en el momento en que te vi supe que eras mio, decías que eras mio y...y yo lo creía. 

  — Tony fue un error...Ella me obligo yo- —. Dio un paso adelante pero Tony lo detuvo con sus palabras. 

  —  No des un paso más en mi dirección James.  No soy consiente cuando estoy a tu lado — Tony volteo su cara hacia el, mirándolo y a James se le rompió el corazón en ese momento. 

Tony tenia los ojos inyectados en sangre y las lagrimas caían por sus mejillas hasta estrellarse en ropa. 

  — Muñeca nosotros podremos salir de esta solo, si me dejaras explicarte...

 — No creas que hablándome puedes regresar a mis brazos, todo lo que dices son mentiras, no tienen explicación, no la culpes a ella, apesar de que termino siendo la peor amiga de el mundo al acostarme con mi marido. Los dos son escoria. Ambos rompieron mi corazón. 

— Tony perdóname...  — Susurro agachando su cabeza.

 — No me hablas de susurros, yo se de ellos, no soy ingenuo, he visto como la mirabas ¿crees que no lo notaba?. Pero lo ignoraba, pensaba que me amabas...de verdad lo pensaba. 

Tony se levanto, limpiándose las lagrimas con desesperación y furia. Tenia un montón de cartas en su mano, las cartas que Bucky le había escrito, esas cartas llenas de amor y promesas vacías,  miro fijamente los ojos azules de Bucky dijo: 

  — Quemare tus caras, las veré ardes, junto con nuestro recuerdo, junto con lo que alguna vez fuimos. 

Dicho esto tiro todas las cartas al fuego, las cuales comenzaron a arder enseguida, Bucky grito un "¡No" y corrió hacia la chimenea, pero ya era muy tarde, no quedaba nada. Ninguna muestra de afecto en tinta, ninguna poesía bonita dedicada, todo se había borrado, eliminado, no quedaba nada. 

Solo quedaba un corazón roto. 

  En cuanto se quiso voltear hacia Tony este ya no estaba a un lado de el, sino en la puerta con un bebe Peter en brazos  y la maleta en la otra.

 — Tony no te vallas...

  —  Espero que tus amistades me recuerden como fui y no como un hombre con el corazón roto.

  — Te amo... —. Susurro como ultimo recurso. Estaba desesperado. 

  Tony lo miro y escupió con impotencia e ira — Espero que tú...Ardas.