My Cat // KookV

MY CAT

[Lo siento, pero era necesario]

<<JungKook>>

Ha pasado un tiempo desde que estamos juntos. No he contado los meses, él tampoco. Los días son cortos pero la vida es larga. Le he respetado. 

Compramos una cama más amplia, para dormir abrazados. Cuando le miro dormir compruebo que le quiero cada día más.

Le he besado, mi pequeño tiene malestares desde ayer. Sería una falacia decir que desconocía del tema, quería oírlo de sus labios y así fue "él estaba entrando en celo".

Sus ojos me miraron suplicantes, en esos momentos entendí que perdería una otra vez contra ellos.

Lo recostó sobre la cama asegurándose de ser cuidadoso.

Comenzó besando sus mejillas y con estas liberando cada botón, besó también la punta de su nariz, ascendió para besar su frente, tomó sus mejillas entre sus manos y juntó sus labios en un beso lento.

Jungkook se sintió muy atrevido descubriendo la piel de su novio, y aún más cuando comenzó a acariciarle.

Tan suave.

Comenzó a descender sus besos que solo rozaban apenas la piel acanelada, le observó un poco.

Precioso.

Besó su abdomen, su pequeño soltó un sonido, probablemente una de sus risitas, él le sonrió viéndolo tan tímidamente adorable.

Perfecto.

Dio un beso más y deslizó las prendas inferiores del menor.

Los gestos del menor cambiaron, pero continuaron tiernos

JungKook se deleitó con aquellos soniditos, mirándole descubierto, la criatura más hermosa.

Una obra de arte.

El menor le atrajo a si mismo.

- Est-Esto es muy egoísta.

El castaño le miró a los ojos, aún continuando sus movimientos, el menor abrió sus piernas, dejando muy intimidado al castaño.

Aunque se prometió no dañarle, pues su TaeHyung era un ser muy puro para profanar, comprobó una vez más que los ojos hipnotizantes del mencionado siempre ganarían.

Se detuvo, se deshizo de sus ropas e inclinó, asegurándose de darle muchos mimos, TaeHyung le recibió y le abrazó, rodeandole hasta los hombros.

Se besaron nuevamente, continuando con sus movimientos hasta colorear las, antes perfectas, sábanas blancas.

Preguntándose ¿Porqué en un momento como este ambos tenían una muy bonita sonrisa en sus labios? ¿Porqué la sonrisa no parecía desaparecer incluso después de separar sus labios, después de terminar recostados, después de que el cansancio se apoderará de sus cuerpos?

La respuesta era muy simple. Ambos entregaron más que sus corazones en esa noche, estaban felices de entregarse por primera vez a la persona correcta a un amor tan dulce como una galleta y tan adorable como un gatito. 

Fin.