Once upon a Victorius

Capitulo 10

Buenas, otro capítulo. No me odien.
Me parece medio corto pero bueno, no quería meter otra escena porque se iba a ir muy largo.
Espero que les guste. Me disculpó por los errores, espero sus comentarios.
Saludos.

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Hospital de Storybrooke.

-Señorita Swan deje eso.

Emma se volteó asustada al escuchar la voz de la morena y soltó rápidamente el monitor de frecuencia cardíaca provocando que un pitido infernal se escuchará por toda la sala. Regina entró a la habitación negando con la cabeza, se acercó al costado de la cama y lo volvió a dejar en su lugar pero el pitido no cesaba, varios intentos después la alcaldesa logro que dejara de sonar.

-¿Que intentaba hacer?

-Nada.

-Emma...

-Okey, me dió curiosidad que hacía el aparato. Estoy aburrida, me dejó sola por casi una hora y Tori no ha vuelto.

-Lo lamento fui por el inepto de Whale pero estaba en una operación, asique salí hacer un par de llamados aunque sea domingo, como alcaldesa no tengo días libres.

-Comprendo, cuando eres un servidor del pueblo te tienen atado. Es lo que más detesto de mi trabajó, muy pocas veces puedo tener un fin de semana para mí y para Tori.

-Hablando de eso...

Regina se giró y comenzó a buscar algo en su bolso, mientras le brindaba una maravillosa vista de su parte trasera a la rubia, la cual no pudo evitar que sus ojos se quedarán fijos en cierta zona de su cuerpo. Una vez que la morena encontró lo que buscaba se giró, al ser atrapada en tal acto descarado Emma se puso roja como un tomate al ver como Regina la veía con una ceja levantada.

-¿Señorita Swan tiene fiebre?

-No ¿Porque?

-Esta toda roja, ¿se siente bien?

-Estoy perfecta, solo me duele un poco la pierna.

Regina pudo notar la clara mentira pero no quería indagar más allá, estaba segura que la rubia estuvo mirándola descaradamente y sintió vergüenza al ser atrapada, no quería incomodarla más de lo que estaba.

-Esta bien, como sea, su teléfono no ha dejado de sonar estos días. Tori no lo ha querido atenderlo y por mí parte no quise entrometerme pero creo que debería llamar a ese tal Walsh o su trabajo, esos dos números no han dejado de aparecer en la pantalla cada diez minutos.

-¿Sobrevivió al accidente?

Dijo la rubia sorprendida mientras lo tomaba con su mano izquierda. De inmediato lo desbloqueo y comenzó a revisar el historial de llamadas, más de cincuenta llamadas, varias de la comisaría, un par de su vecina y otra docena de Walsh. Con un suspiro abrió WhatsApp y le envío un mensaje para informarle que estaba con vida, en menos de dos segundos su teléfono comenzó a sonar.

-Debí suponer que llamaría.

-¿Quiere que salga?

-No está bien, será rápido.

-¡Emma!

-No es necesario que grites Monkey, puedo oírte.

El hombre del otro lado de la línea ignoró por completo el apodo que tanto odiaba y continuó hablando desesperado, tanto que Regina podía oír todo lo que le decía desde la distancia.

- ¿Dónde diablos has estado? Me dejaste plantado en nuestro aniversario, eso no es normal nunca faltas, ¿Porque no atendias mis llamadas o responder los mensajes? ¿Dónde está Tori? Tampoco pude contactarla a ella. ¿Qué pasó? ¿Estás bien? ¿Tori está bien? ¿Dónde están? Y no te atrevas a mentirme acabo de venir de tu casa y tu vecina no te ve desde el viernes por la noche. Maldición Emma ¿sabes lo preocupado que estoy?