Querido diario | LuWoo

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Querido diario,

a ver, ahora mismo estoy encerrado en el baño, ¿okey? Estoy escribiendo esto en el móvil para mañana lo pasaré al diario, si no se me olvida claro.

En fin, hace un rato he llegado y entonces Ten ha abierto la puerta. Y para aclarar, él ya estaba medio ebrio. Entonces me coge del brazo y me tira dentro de la casa. Vamos al salón y todo normal hasta que... Llegaron las presentaciones.

Primero estaban los primos de Taeyong, que se llamaban Johnny y Mark. Ellos no son de aquí, si no que Johnny es de Chicago y Mark de Canadá, aunque hablan perfectamente el coreano.

Y DESPUÉS, ESTABAN SUS AMIGOS. Uno de ellos era YoonOh, o también llamado Jaehyun (para los amigos). Doyoung estaba perdidamente enamorado de él. Es más, son amigos de la infancia, pero al parecer Jaehyun no le da bola a Doyoung.

Pero, eso no es lo importante. Lo importante es el otro amigo de Taeyong.

Adivina quién es.

NI MAS NI MENOS QUE WONG YUKHEI. O SEA QUÉ.

SI. Wong Yukhei estaba en frente mío. Con una fucking sonrisa. Que mal.

O sea ya te puedes imaginar mi careto. ESTABA EN SHOOK. Él me dijo "Encantado de conocerte por fin, tropezamos en el pasillo el otro día, ¿verdad?". DIOS QUE VERGÜENZA ME HABIA DADO. Yo solo asentí y le dije a Ten que me iba al baño así rapidito.

Y aquí estoy, sentado en el suelo junto a la bañera mientras escribo esto.

Yo quería venir aquí para olvidarme de Lucas, pero es que parece que me siga a todas partes. Es como una lapa, no voy a poder librarme de él o algo. A VER, NO DIGO QUE NO QUIERO, AL CONTRARIO, ME ENCANTARIA.

En fin, esta noche se va a descontrolar. Ten ya está ebrio y Taeyong seguramente esté intentando aguantar todas las cosas que dice un tailandés cuando está borracho. Pero no un tailandés cualquiera, si no Ten.

Y al entrar ya estaba escuchando los papeles para los porros ser envueltos. Qué divertido oye.

Tengo que decir que yo en realidad nunca me he drogado ni fumado. Solo bebo ya que fumar me parece un poco extremo para los pulmones y no es plan para pillar un cáncer de pulmón tan joven.

A ellos les da igual todo, lo hacen tal cual.

Y luego mis padres se piensan que soy un santo. JA. Todo mentira.

En fin, voy a salir ya de aquí y voy a unirme a la fiesta. Espero recordar la mayor parte de esta noche para escribirlo mañana en el diario. Y espero recordar también pasar esto a las hojas.