Ansiedad Social (Humantale Frans)

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Muchas emociones puedes vivirla en mucho, poco o quizás nunca experimentarlo. Pero si de algo Frisk estaba segura es de que lo que sintió con aquel beso que fue dado con el albino fue demasiado irreal.

Siempre leía que estos momentos una se sentía en el mismo cielo, o que mariposas le revoloteaban por su estómago.

Ella se sentía más allá de las estrellas y que en vez de mariposas tenía bombas nucleares explotando sin pausa. Realmente nunca se sintió tan bien en lo que va de su vida.

El albino no estaba tan alejado de esto, y sentía algo muy diferente que cuando estaba con Muffet, la paz que sentía era plena y realmente quería que ese momento nunca termine.

La abrazo como si se tratara de una pieza de arte extremadamente delicada y frágil, así sentía que era la castaña, pero a su vez fuerte como un roble. Y aquellas ramas que representarían sus brazos hubieran sido dañados pero como todo árbol puede volver a crecer y eso era lo que quería lograr con su castaña.

-Decidido eres mi novia ahora- mencionó mientras le acariciaba el cabello, Frisk no respondió de la vergüenza que sentía.

-No, hace falta que lo digas cada rato...- dijo con bochorno -Por favor, no me dejes sola, es lo único que te pido-

-No lo haré niña, esta será la segunda promesa que te haré y solo a ti-

Frisk no pudo evitar volver a sonreír, esta vez de verdad.

-Muchas gracias Sans... - dijo para cerrar sus ojos un momento.

-No tienes que agradecerme... Ahora será mejor que nos vayamos antes de que te quedes dormida o yo lo haga, se está haciendo tarde y no quiero que tu hermana se preocupe-

Sin decir más la levantó y se dirigieron a la salida de la institución.

*

Sans por supuesto que acompañó a la castaña a su casa, claro que antes pasaron por la suya para recoger la motocicleta para evitar caminar de más porque el albino quería evitar la fatiga de caminar luego.

Sans quería ir despacio por lo que no le tomó de la mano en ese lapso, y Frisk agradeció eso, le tenía mucha paciencia y eso era una de las cosas que le encantaba de él.

Volviendo a la pareja está se hallaba frente al marco de la entrada. Entraron mientras charlaban para luego pasar al comedor.

-Ya era hora de que volvieras hermana- saludo Chara desde la cocina, en cuanto vio que no estaba sola su cara de alegría que llevaba encima fue removida -Oh por cierto me falta una cosa para la cena ¿Podrías traérmelo? - dijo mientras anotaba en una hoja aquello y le extendió a su hermana.

-¿Seguro? Ya vuelvo... - Frisk sin decir más se retiró acatando el pedido.

Mientras que el albino tenía su sonrisa despreocupada de siempre, claro, algo normal sin contar por las gotas de sudor que he iban acumulando.

Su dulce cuñada, justo traía en la mano un cuchillo de un generoso tamaño.

- Estos días mi hermana no durmió bien, y tenía miedo de que volviera a sufrir de maltratos en la escuela- comenzó a hablar -No te imaginaras mi sorpresa al saber que no era eso, por un lado estuve feliz... Pero por el otro... Me dijo que le gustaba alguien, pero que no era correspondida. No hace falta que ella dijera más para saber de quién se trataba- hizo una pausa mientras se acercaba - No puedo obligarte a que demuestres interés por ella, pero como te lo pedí antes. No juegues con ella Skeleton-

-Wow, creo que hay un buen malentendido aquí niña 2, en lo que dijiste tienes razón. Excepto por una parte, ella "creyó" que no era correspondida- explico haciendo el gesto de las comillas con sus manos -En realidad si me gusta y me encanta Frisk pero tuvimos un muy mal malentendido por lo que no hablamos estas semanas, pero en ningún momento pensé siquiera en jugar con ella- sacaba fuerzas para poder decir todo aquello de donde no sabía, realmente le daba miedo estar frente a la otra castaña, y ese tamaño de cuchillo era para preocuparse un poco- Chara yo hablé con tu hermana seriamente y no sé cómo reacciones ante esto pero mejor que yo te lo diga, voy a comenzar a salir con tú hermana, y no necesito tu aprobación-

-...- sé le quedó mirando un muy buen tiempo y pensó muy bien lo que diría -Gracias Sans-

-No es nada querida cuñada-

-¿Uh? ¿Me perdí de algo?- dijo Frisk con temor.

Pero ambos miraron con una sonrisa, quizás solo empezaron mal, pero por Frisk tratarían de mejorar su relación.

-Nada cariño, solo le comentaba a mi nueva cuñada que estamos saliendo-

Frisk miro sorprendida a su hermana y esta se le acercó con un semblante serio, oh no. Seguro que no le gustó eso, así que cerró sus ojos esperando la reprimenda.

Chara fue a abrazarle suspirando de tranquilidad.

-Si eres feliz Frisk no importa lo que diga- le habló con un tono maternal que sorprendió a su hermana -claro que eso puede cambiar si es que él otro lo arruina, tendré todo preparado para ese entonces-

-Abrazo familiar entonces-

El albino se integró al abrazo, en lo que Chara intentaba apartarlo y una Frisk que sonreía por ellos dos.

Quizás aún puede buscar un poco de felicidad...

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No diré mucho ya que estoy camino el trabajo.

Espero que les haya gustado!

(disculpen los horrores ortográficos)