Parte 4- El Robo del siglo*

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[Daniel y Luna se encuentran parados frente a la zona de mercados de la ciudad, donde se venden armas, pociones, suministros y hechizos para los aventureros que se dirigen al exterior. Él guía a Luna a una esquina del mercado, que es muy poco transitada, y le explica su plan.]

Daniel- ¡Mira, Luna! *Extendiendo sus manos hacia el mercado* Este es el cielo de los ladrones como yo que buscamos un lugar lleno de mercancías y poco vigilado. Será perfecto para enseñarte lo básico.

Luna- Mh, ya veo, los mercaderes se encuentran muy distraídos con los clientes y la llegada de nuevas mercancías. Esto hace que no puedan vigilar sus bienes de posibles ladrones.

Daniel- Qué seríamos nosotros... Parece que por lo menos aprende rápido...

Luna- Ya, pero no veo cómo podremos esconder lo que robemos y salir sin ser vistos.

Daniel- Mh, me agrada que preguntes, lo lograremos con una estrategia que diseñe hace poco, la cual habría sido imposible antes de que encontrara un cómplice. *Guiñando* ¿Conoces el dicho de "divide y vencerás"?

Luna- No, no me suena...

Daniel- Es una frase que indica que para poder vencer a un enemigo mucho mayor a tus fuerzas, debes dividirlo y eliminarlo por separado.

Luna- ¿Y eso en que se traduce a nuestra situación? No es como si estuviéramos en un campo de batalla o algo parecido.

Daniel- Fácil, el enemigo, siendo en este caso el tendero, puede vigilarnos a nosotros dos todo el tiempo que sea necesario, haciéndonos imposible robar lo que sea. Sin embargo, si nos colocamos uno en cada lado de su puesto, el tendero no tendrá más opción que dedicarle su atención a uno de nosotros. Es ahí cuando aprovecharemos la oportunidad y le haremos un "yunque y martillo".

Luna- Mh, podría funcionar, pero recuerda qué hay más personas en los alrededores, ¿Como los distraemos a ellos también?

Daniel- Eso ya lo tenía contemplado. Primero llegarás tú con el tendero de ahí *apunta con el dedo hacia un puesto* desde el lado de la calle principal. Al llegar, pasarás por el estante de armas que tiene al frente y fingirás que te tropezaste con él. Eso atraerá la atención de los clientes y tenderos de alrededor. Mientras tanto, yo me acercaré por el otro lado y agarraré lo que pueda.

Luna- ¿Y por qué debo ser yo la que me tropiece con el estante?

Daniel- *Con una cara risueña* Porque eres la más convincente a la hora de fingir.

Luna- ¿En serio?

Daniel- Claro, por ejemplo, la primera vez que nos encontramos no parecías alterada en lo absoluto.

Luna- Eso es porque solo me impresionó por las cosas de mayor magnitud.

Daniel- ¿Qué me habrá querido decir? *Limpiándose la garganta* Mhmhmh, el punto es que eres muy convincente. Aparte, yo soy el que traigo esto. *Abre su túnica para dejar ver un cinto con compartimentos*.

Luna- ¿Y eso de donde lo robaste?

Daniel- *Irritado* ¡Esto no lo robe! Lo hice yo mismo para guardar lo que robo. Uno tiene que hacer su pequeña inversión si quiere conseguir mejores cosas, ¿No lo crees?

Luna- Lamentable... Ok, ya entendí, entonces yo soy la distracción y tú el que roba ¿No?

Daniel- Exacto.

Luna- Bueno, vamos, mientras menos tiempo tenga que pasar con un pervertido como tú, mejor...

Daniel- *Agarra a Luna de la túnica* no tan rápido, ¿Ves ese cliente de allá? *Apunta hacia un hombre que se encuentra comprando en el puesto indicado* Tenemos que esperar a que se vaya para poder colocarnos a ambos lados de la tienda sin que nadie nos interrumpa.

Dauyo Y un grupo generico.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora