Daddy's cherry lips - lrh

17

- ¡¿Qué?!

El grito de Tessa suena por toda la cafetería y provoca que varios volteen a vernos. La miro mal y mi amiga pide una disculpa y regresa sus ojos a mí.

- ¿Podrías bajar el volumen? -la cuestiono apenada-. No quiero que todos se enteren.

Mi amiga hace una mueca.

- Lo lamento, pero es que no puedo creerlo -me responde-. O sea, es que no entiendo el que hayas salido corriendo después de que he dijo que te quería.

- ¿Y qué querías que hiciera? -la cuestiono-. Me dijo de la nada que me quería, y me tomó por sorpresa. O sea, no se suponía que haría eso.

- ¿Por qué no?

- Porque es Luke Hemmings -declaro sin vacilar-. Se suponía que me iba a romper el corazón.

Tessa bufa, rueda los ojos y me da un golpe en el brazo.

- ¡Eres la chica más enredosa que he concido en mi jodida vida! -exclama- O sea, yo sé que soy una pendeja en el amor, pero creo que tú lo eres más. Si a mí me dijera el chico de mis sueños que me quiere no huiría.

- ¡¿Qué harías, Tessa?! ¡Ilustrame!

- Fácil -deja salir un soplido-. Le haría una mamada.

Me le quedo mirando sorprendida un segundo y después suelto una gran carcajada. Tessa también se ríe, niego con la cabeza y le respondo:

- ¿Sabes qué es lo peor de todo? Que sí creo que le harías una mamada.

- La mejor mamada de su vida -me presume-. No es por nada, pero a todos los que les he dado una siempre me dicen que soy fantastica.

- Que orgullo -comento con sarcasmo.

- ¡Para algo debía ser buena! -se acomoda el cabello- Soy la jodida ama de las mamadas. La reina de la puteria. Te aseguro que me casaré con algún viejo rico y a punto de morir gracias a mi boca.

Vuelvo a reírme.

- ¡Eres la mejor amiga del mundo! -le digo alegre.

- Lo sé -encoge los hombros-. Pero, oye, ya en serio, Noora. Sé que puede ser aterradora la idea, para ti, de que un hombre sexy te declare su amor. No tengo idea de por qué, pero no te juzgo. O sea, cuando Kevin me dijo que me amaba salí huyendo de la relación, y bueno, ahora no andamos, pero... -se queda pensando- Mierda -dice después de un segundo-. Ahora que lo pienso fui igual de estúpida que tú -suelto una risa-. Pero, oye, mírame -se señala-. Soy un completo desastre, Noora, no sigas mis pasos. Sólo en las mamadas -agrega moviendo su dedo indice frente a mi cara-. Pero en lo demás no lo hagas. Ve con él, dile que tú también lo quieres y dale la mejor mamada de su vida. Sigue este consejo y te casaras con él.

Me río.

- ¿Quién me lo asegura? -le pregunto divertida.

- No lo digo yo, Noora, -encoge los hombros- lo dice la ciencia.

Mientras comía mi ramen instantaneo sabor a pollo, miraba anime y encantada veía como Nashina y Serinuma se decían cuanto se querían y se abrazaban.

Inevitablemente, pienso en Luke y sonrío. Él me había dicho te quiero, y aunque había huído de la oficina, no me había mandado mas que uno donde me decía que me daba espacio y el tiempo que necesite. Tomo el celular y sin pensarlo, escribo:

¿Vienes a mi casa? Mis padres están en una cena del bufete de abogados.

Lo envío y sigo con lo mío. A los diez minutos, mi celular vibra, pero no por la llamada de la persona que deseo sino por la de Chuck. Bufo y contesto: