capitulo 6

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-Espero que mi cama haya quedado fuera de tu revolcón-anuncié nada más entrar a mi casa.
Moisés a pesar de estar lleno de moretones seguía siendo atractivo para el género femenino y no dudo en que varias chicas cayeron en sus redes.

-Admito que fue una tentación, pero con todo lo que has hecho por mí, mantuve a mis chicas lejos de tus cosas- el gesto de satisfacción que tenía era... bueno, poderoso.

-Alguien pasó un rato agradable- me senté a un lado de su cama. Él solo sonrió en respuesta.
Tras bajarse de la nube en la que andaba me miró con el ceño fruncido.

-¿Qué es?-pregunté checando mi aspecto- ah, esto... - caí en cuenta de que miraba mi camisa. Él encarcó las cejas y se cruzó de brazos.

>>Tranquilizate. No tuve sexo salvaje, si es lo que estás pensando.

-Eso me preocupaba más. Fue una fiesta loca, se me hace imposible que no sucumbieras a tus deseos oscuros.
>>Además, mira la hora. No te creo.

Fue mi turno de poner mala cara.

-Tuve que cuidar a la cumpleañera para que no se ahogara en su propio vómito. Tuve que sacar por lo menos 3/4 partes de los asistentes esta mañana de esa casa. Tuve que recoger prácticamente todo el mugre de ese lugar para encontrar mi camiseta y lo irónico del asunto es que no vi ni su rastro. Así que tuve que usar la camisa de un chico que se quiere pasar de listo conmigo y la fresa del pastel... Tuve que caminar a casa porque mi compañero de casa me abandonó si un centavo.

-Oh vaya. Eso lo resume todo.

- Así que discúlpame si a parte de llegar tarde, tengo la camiseta de un bad boy.

Paso de largo al baño y tras media hora en la ducha, finalmente decidí salir.
Pero del buen genio de Moisés, no quedaba ni rastros. En cambio, el rostro de mi compañero parecía verde.
Tal como si fuese a vomitar.

-¿Qué pasa?- pregunté acercándome con sutileza.
El chico estaba congelado junto a la puerta y tenía un papel en la mano.

Con cuidado se lo arrebaté y lo leí:

"Querida compañera del joven Moisés.

Es para mí un placer, invitarla a una reunión de negocios en el mismo lugar en el que nos reunimos sin intención la primera vez.

Espero por favor, pueda asistir.

La espero a las 10 pm del día miércoles.

Con cariño: Vincent"

¿Qué demonios?

- Moisés ¿Han hablado contigo? ¿Te han pedido mi nombre? - él negó repetidas veces.

- No he vuelto a aparecer por allá. Ni loco que estuviera ¿Qué te escribió?

-Quiere verme el miércoles en la fábrica.

-Oh mierda. ¿Qué hiciste?

-Nada, solo hice lo que debía.

-Sí. Pero ¿Qué hiciste?

-Nada. Solo... Golpeé a un chico ¿Acaso tenía que hacer algo más?

-No, no. Pero... ¿Cómo fue la pelea?

-Vamos Moisés. Sabes exactamente cómo es una pelea.

-¡TUVISTE QUE HACER ALGO EN ESPECIFICO! ASÍ FUNCIONA CON VINCENT- le miré ceñuda cuando me alzó la voz- lo siento... Lo siento, es que... Es lo que él hace; observa chicos que tengan un buen desempeño en las peleas y luego le ofrece sus servicios. No sé cómo lo hace, pero cuando pone el ojo en tí es muy díficil que te salves.
>>Uno de sus chicos me vió pelear en las afueras de la universidad y luego varios días después se hizo pasar por un anciano siendo atacado.
>>Lo defendí y allí me ofreció ayuda. Me negué pero luego todo comenzó a ir mal, perdí mi otro empleo y no sé cómo diablos caí en deudas.
>>Sabes cómo soy Maia, yo no me endeudo pero...- hizo un movimiento con sus brazos en señal de desgano- pero ya no me puedo librar de él. Así que dime cómo peleaste, sabes que yo entreno artes marciales mixtas y soy bueno. Dime- me tomó por los hombros.

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