Capítulo V

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Narra Alan

El tiempo para contestar el examen era de 50 minutos, faltaban 10 minutos y Alexis y yo ya habíamos terminado, le entregamos nuestros exámenes a la orientadora y nos salimos del salón.

-Pensé que no acabaríamos -dijo sonriendo

-Yo igual, aunque no estuvo muy difícil

-Si, pero como no estudie, se me dificultarón algunas cosas

-A mi igual, pero bueno, ahora a esperar los resultados

Hoy estaba nublado, yo tenia demasiado frío,  pero Alexis estaba feliz, si algo había aprendido en este tiempo de conocerlo, es que le encantaban los días así. 

-Vamos a la cafetería -dijo mirándome

-Vamos -le conteste

-¿Tenemos algún otro examen?

-Mmm... No, creo que no -conteste

Llegamos a la cafetería compramos café y nos sentamos en una de las mesas.

-El día es perfecto -dijo tomándole a su café

-Yo estoy muriendo de frio -dije temblando

-¿Quieres mi sudadera? -dijo mientras se la quitaba

-No, te va a dar frío

-No hace frío -dijo -ten pontela

Accedí y agarre la sudadera, me la puse y  se me quito un poco el frío, aunque sentía feo ver a Alexis sin suéter.

-¿Está mejor? -me pregunto

-Si, gracias -me límite a contestar.

Narra Ian

Estuvimos platicando por un rato, después la enfermera fue a checar a Dayana una vez más y le dijo que ya estaba mejor, salimos de la enfermería, la clase de ingles ya había terminado, asi que no tenia caso ir al salón, el tiempo se había pasado rápido, le dije que tenía que comer algo, así que fuimos a la cafetería.

Cuando llegamos ahí se encontraban mi hermano y Alexis,  Dayana se sentó con ellos en lo que yo le compraba algo para que desayunara. Llegue a la mesa y me senté a un lado de mi hermano.

-Ten, te lo comes todo -dije acercandole un cóctel de frutas y un jugo.

-¿Estas enferma? -le preguntó Alexis

-Me dolía la cabeza y mi estomago -contestó ella

-¿Ya fuiste a la enfermería? -le preguntó mi hermano

-Ya, Ian me ha llevado -Alexis volteo a verme y me sonrió

-¿No tienes frío? -le preguntó Dayana a Alexis

-No mucho

-¿Y tu suéter?

-Se lo di a Alan -dijo sonriendo -estaba muriendo de frio -Alan asintió

Cuando el receso término regresamos a nuestros salones, Dayana y yo llegamos y el profesor ya estaba allí.

-¿Podemos pasar? -le dije al profesor

-Adelante -dijo sin mirarnos

Nos ubicamos en nuestros asientos y tomamos la clase.
El resto de la clase se me paso rápido, sonó el timbre de cambio de clase, guarde mis cosas, espere a que Dayana guardará las suyas, salimos del salón y Caminamos hacia el patio principal.

Narra Alexis

Regresamos al salón, tocaba clase de historia, pero esa clase la teníamos libre, realmente era un alivio que no hubieran puesto algún maestro suplente, cuando estábamos en la cafetería, había notado un poco raro al hermano de Alan, tal vez eran alucinaciones mias, pero juraria que estaba celoso, aunque no se por que razones lo estaria, en fin, todos en el salón se salieron, nosotros nos quedamos en el salon, así que nos pusimos a platicar en lo que terminaba esa clase.

-¿Quieres tu suéter? -me preguntó

-No, úsalo -conteste mirándolo

-¿En serio? -insistió

-Si, seguro

-¿Has vivido aquí siempre? -me dijo

-Si, ¿Por qué? -contesté

-Curiosidad, solo eso

-Y tú, ¿Por qué llegaste a vivir aqui? -le pregunté

-Por el trabajo de mi papá,  es contador y en su trabajo lo trasladaron a una empresa que está aquí

-¿Y te gusta aquí? -pregunté

-Si, es muy bonito -se limitó a contestar

                      ***

Las clases terminaron, guardamos nuestras cosas, y salimos del salón, la ultima clase había sido la de Literatura, para la siguiente clase teníamos que exponer, así que al parecer iba a tener un fin de semana muy ocupado.

Llegue a mi casa y subí a mi cuarto, tome una ducha y baje a comer, solo faltaba mi papá, pues había salido de imprevisto al trabajo, así que solo comí con mi mamá.

-¿Cómo te fue hoy? -me preguntó

-Bien, el día estuvo tranquilo -conteste

-¿Aún hablas con Dayana? -mi mamá aprecia demasiado a Dayana, es como una hija para ella

-Si, hoy estuvimos juntos en el receso

-Me alegra - contestó -a ver cuando viene a la casa

-Le diré que venga mañana, ¿Te parece?

-Me parece una buena idea -dijo sonriendo

En ese instante llego mi papá, nos saludo y se sentó a comer con nosotros, no es por nada,  pero mi familia es muy unida, no la cambiaría por nada, además de que se habían tomado muy bien el que yo fuera gay.

Insisto son la mejor familia, tal vez la que todos quisieran tener.

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