Emir se estremeció ante la horrible noticia, Vek estaba muerto ¿Pero cómo era eso posible? Él era muy fuerte, osado y astuto. Parecía una tremenda burla que alguien como él haya caído demasiado fácil. El joven cayó de rodillas y empezó a llorar sin consuelo, había perdido al hombre de su vida. No lo volvería a ver nunca más. Dante al verlo así se puso muy triste, entonces hizo lo que pensó era lo correcto, lo abrazó cálidamente.
— ¡¿Pero cómo es posible?! ¡¿Qué mierda pasó?! ¡Me va a dar un ataque, te lo juro!
—... lo agarraron entre muchos betas. Además él... cayó débil por amor.
— ¡¿Qué?! —Emir deja de llorar y lo mira atentamente pero entre lágrimas.
—Aunque parezca mentira... Vek de a poco estaba empezando a sentir algo por vos. En ese momento él sólo pensaba en ponerte a salvo. Es cierto que era un acostón pero en éste último tiempo lo hizo para sacarte de su cabeza... pero no pudo...
—... ahora me quedan claras muchas cosas. Pero aun así no niego que me siento mal. Él me gustaba muchísimo pero... —Vuelve a llorar.
El joven se levanta y con un pañuelo descartable seca sus lágrimas como podía ya que era muy fuerte el dolor que sentía por Vek. Dante simplemente lo miró. Pero Emir todavía seguía afectado, era una mala noticia la que había recibido.—Mañana en la noche le haremos un funeral a Vek. Estás invitado por si decidís venir a verlo una última vez. Te estaré esperando.
—Ahí estaré... pero quiero estar solo ahora.
—... está bien pero si querés me quedo. No tengo problema.
—Te lo agradezco Dante. Pero por favor quiero y necesito estar solo.
—No puedo dejarte así solo en ese estado. Insisto, me voy a quedar con vos.
— ¡Dije que quiero estar solo! —Gritó tirándole una almohada.
Dante se quería quedar. Pero viendo el estado del joven era obvio el por qué quería estar solo. Así que casi conteniendo sus lágrimas se fue. Las horas fueron pasando, Emir abrazaba una almohada imaginando que era Vek. Ni ganas de leer el diario tenía para distraerse. Simplemente cerró sus ojos, se durmió y deseó con todo su corazón despertar... y que esa noticia fuera simplemente una pesadilla que jamás pasó.
Al día siguiente, siendo ya de noche. Los ALFAS se encontraban en un gran salón de su escondite. Habían cuerpos cubiertos con sábanas blancas y flores. Dante, Emir y otros llevaban antorchas encendidas. Para Emir fue muy duro recordar como antes de la ceremonia, vio como colocaban el cuerpo de Vek. Al verlo había corrido y lo abrazó entre lágrimas. Algunos lo iban a detener pero Dante y Adam lo evitaron.
Ahora Adam le estaba prendiendo fuego, era el único de los hombres lobo con los ojos rojos pero por aguantar las ganas de llorar. Le costaba, Emir lo notó y dejó pensando. Sin embargo Adam logró que el cuerpo sea consumido por el fuego. Al verlo, lloró, Dante lo abrazó. Adam también se quebró entre lágrimas. Nacho le puso una mano en el hombro, luego de eso todos tomaron su forma de lobo y aullaron tristemente.
Media hora después, Emir leyó el diario para saber que pasaba cuando un lobo moría pero se impactó al leer la historia de Nat. Llamó a Dante y Arnold. Con cuidado les leyó las páginas. Ahora eran padre e hijo quienes lloraban por esas palabras. Emir no tuvo otra que abrazarlos. Los hombres poco a poco se fueron calmaron.
—Sos un héroe y un buen padre. —Afirmó Emir.
—... gracias. Te lo agradezco. —Dijo conmovido Dante.
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El Oscuro Diario De Un Amor Diferente
Hombres LoboDos clanes de hombres lobo luchan por el destino de Buenos Aires, los betas para eliminar a los humanos y los alfa para salvarlos. Un clan de omegas que aún no decide a cual de los dos grandes grupos seguir. Mientras que por otro lado los humanos en...