léeme

Las 4 estaciones.

La primavera tan romántica nacía con cada año.
Dando acto de presencia unas lindas flores de cerezo.
Con la paz que solo ella proyectaba.
Las rosas nacieron.
Los animales volvieron.
Los humanos acontecieron.
Y el tiempo pasó como los pétalos de las flores se fueron marchitando dejando atrás la vida tan corta que tuvieron.
Poco a poco la primavera se fue apartando.
Dejando sombra, amargura y hojas secas.
Qué el otoño encantado recibió.
Jugo con las hojas secas armando una alfombra que atravesaba todo el mundo.
Se divirtió desnudando a los árboles.
Impacto lluvias románticas y melancólicas, jugando con los sentimientos de todos.
Mantuvo a todos en sus hogares.
Dejo sin comida poco a poco a los animales. Jugando con las vidas como invierno le había enseñado.
Pronto se aburrió y dejo todo marchito a su paso.
Habiendo paso a la muerte.
Lindo invierno llegó.
Oscuro de día, oscuro de noche.
Los animales no estaban.
Corrieron a protegerse del feroz frío que atormentaba.
El invierno furioso impactaba.
La nieve tan fina y pura, que no parecía parte de tan atormentada muerte que conlleva el invierno.
Los lagos congelados creaban un gran espectáculo.
Dolor tan desgarrador que no fuera apreciado.
Como el arte de los árboles secos sin vida.
Sin flores, sin hojas, sin frutos.
Invierno se cansó de jugar con las vidas que dejó la primavera.
Se largó prometiendo volver más furioso que antes.
La oscuridad se largó y la luz entro.
Tan alegre y jovial.
El verano regocijaba de felicidad.
Siendo la estación más amada.
Siempre trayendo consigo la diversión.
El sol arrogante resplandecía con sus rayos triunfantes.
Los niños jugaban con los animales en el lago.
Y el lago los abrazaba tiernamente embalsamado por el regocijo que estos desprendían.
Los humanos salían.
Todo era una utopía.
Lamentablemente no todo es eterno el verano acaba, la primavera se marchita y otoño jugaba con el invierno a quitar vidas.
El ciclo de la vida.