[ ☠️VIOLENTOMETRO☠️ ] (GoldFred) [Historia En Modificación: En Proceso]

"Arrepentimiento <[Final 2# = Neutro]>"

    Llevaba ahí más o menos dos semana, era difícil saber cuánto tiempo pasaba al estar en una habitación con ventanas cerradas y bloqueadas donde era víctima de golpes y violaciones constantes. Tenía una correa suficientemente grande capaz de dejarle movilidad en todo el cuarto, no quitaba el hecho de estar amarrado como perro. Gold entro con una caja de herramientas en la mano.

— Amor, quiero jugar algo contigo—dijo con una sonrisa tranquila.

— No quiero—respondió con un tono seco.

— Oh cariño te prometo que será divertido—se sentó en la cama junto al chico.

— ¿Para ti?—abrazo sus piernas llenas de moretones.

—De igual manera si no coperas tendré que hacerlo por la fuerza—

   No tenía otra opción, accedió y bajo sus piernas, el albino le quitó la camisa blanca que Fred poseía como única prenda, vendo los ojos del chico y lo levantó con delicadeza atando sus manos en una cadena en la parte de arriba dejándolo obligatoriamente de pie, beso su cuello para después guiar un cuchillo en su hombro y enterrarlo sin pensarlo dos veces

—¡¡Ahhhg!!—grito de dolor por la acción.

—Sh-sh-sh,—

   Tomo una cadena que enterró en la piel del abdomen de Fred sacándole un grito, tres cadenas más fueron puestas en su piel; Gold observó con una leve sonrisa aquellas heridas hechas, tomo un cuchillo y lo alzo, tenía como objetivo ese bello ojo plata, antes de que pudiera enterrarlo la puerta fue abierta bruscamente.

—Manos arriba—indico el jefe de policía—Deje el arma o abriremos fuego—

    Gold soltó el cuchillo dejándolo caer en el suelo, rechino los dientes molesto, Fred lloraba en silencio, estaba a salvo ahora, llegaron justo en el momento que más los necesitaba, Freddy logró escabullirse entre los oficiales y al entrar abrazo a su pequeño hermano, pero al oír sus quejas de dolor lo soltó.

—Tranquilo Fred, estoy aquí... Ya estoy aqui——acaricio su mejilla—Todo va a estar bien te lo prometo—le regalo una sonrisa mientras limpiaba sus lagrimas.

—Perdoname, perdóname por no hacerte caso—chillo.

    Llevaron a todos abajo, obviamente Gold fue obligado por los agentes, Fred y Freddy estaban en la ambulancia para estabilizarlo, tenían que quitarle esas cadenas de su cuerpo. Y por otro lado el albino era sujetado por varios policías quienes intentaban controlarlo, lo sentaron en la patrulla y Golden quien había ya salido del coma se acercó a su hermano para darle una bofetada.

—Te mereces mucho más por todo lo que hiciste—Golden frunció el ceño—¡¿En qué mierda pensabas!?—

—Tu nunca lo vas a entender imbecil—hablo seriamente—Papa te dió todo... El te quería, nunca te dijo en tu puta cara que ojalá nunca hubieras nacido, que le arruinarte la vida... Tu jamás escuchaste esas voces, tan molestas y torturantes. Yo merecía todo igual que tú—unas lágrimas deslizaron por sus ojos.

—¿Voces?—lo llamo, en ese momento el albino recuperó su sentido lucido.

—Golden—se miraba confundido ante la situación—¿Dónde estamos?, ¿Que está pasando?—

—Gold—lo tomo de los hombros—Estas enfermo, necesitas ayuda profesional, yo me encargaré de eso... Soy tu hermano sin importar que—se sentía culpable de su estado, nunca se dió cuenta de que tan mal estaba y antes tampoco le importaba.

    En conclusión Fred fue llevado al hospital y Gold ante un juzgado, pero por enfermedad declarada y el retiro de cargas fue condenado a su internación en un hospital psiquiátrico, estaría allí hasta que fuera capaz de reintegrarse a la sociedad.