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Epílogo

7 años después


La habitación grande que mantenía la cama King size, estaba en silencio, con tan sólo los pequeños suspiros de Jungkook llenando la habitación. Jimin abrió los ojos y los tallo con sus manitas, observo al alfa que le había cambiado la vida y sonrió. Habían pasado la noche entera sumergidos en su burbuja rosada, donde Jungkook se dedicó plenamente a hacerle el amor. El alfa había anudado a Jimin, y ciertamente para él había sido lo más magnífico, después de aquella primera vez que sintió ese tipo de sensación, se dio cuenta de que tenía que ser paciente con Jungkook. El doctor había dejado en claro que para un embarazo más seguro, tenían que anudarse. El omega tenía poco conocimiento sobre todo eso en aquel entonces, puesto a que toda su vida había sido un beta.

La primera vez que Jimin estaba esperando un bebé, habían resultado ser gemelos, pero la falta del nudo ocasionó que perdiera a uno de ellos. Era algo que los doctores le explicaron muchas veces pero Jimin seguía sin entender para que era necesario un nudo que a veces dolía como el carajo, en la posición incorrecta.

Los pensamientos y recuerdos del omega salieron volando cuando sintió la mano del alfa acariciarle el cabello, este a su vez, levanto el rostro para observar a su hombre.

—Buenos días
—Buenos días
— ¿Dormiste bien?
—Demasiado bien ¿y tú?
—Me sentí como el Dios del sueño... así que dormir perfectamente

Él omega soltó una risita ante tal exageración del alfa, acarició la pierna desnuda de Jungkook con su pie y comenzó a besar el torso contrario.

—Hmmm, Jiminnie tenemos que levantarnos
— No quiero

Él peli rosa, siguió con su acometida y comenzó a besarle los chocolatosos pezones al alfa, el cual no dudo en gemir un poco. Jungkook normalmente no se dedicaba a gemir, a no ser que su pareja se lo dijera, y alabara los sonidos provenientes de su placer.

—Los niños se van a despertar
—Hace frío, no querrán salir de sus camas
— ¿Quieres apostar?
— No lo harán Jungkook, se quedarán en sus cuartos... y no, no voy a apostar
—Jimin... deja de hacer eso

La mano del omega descendía con vacilación hacia la mañanera erección del alfa.

— No quiero

Jimin se deslizó por el cuerpo de su pareja hasta que su rostro término muy cerca de la polla de Jungkook, este le miró con curiosidad. Una sonrisa muy traviesa se escondió en los labios de Jimin, y saco lentamente su lengua, acercándola a la punta de aquella erección rosada

—Jimin...

Entonces la tomó en su boca como si de una paleta se tratase, realmente se había despertado demasiado feliz. Su cabeza comenzó a subir y bajar por ese humedecido falo y Jungkook no contuvo sus tenues gemidos.

—Mierda...

Los dedos del alfa se aventurado a sus propios cabellos, tratando de tener la situación bajo control, lo que él no sabía era que Jimin siempre estaba en control, cuando de su pene se trataba.

Él cabello rosa de Jimin se movía al compás de sus acometidas, sintió el glande de Jungkook llegar a su gargantilla y se animó a sí mismo para introducirse lo que quedaba, en toda su garganta

—Ah... Jimin vas a hacer que me venga

Él omega dejó salir esa polla caliente y chorreante de su boca con un sonoro 'pop' y le sonrió a su alfa

—Entonces hazlo ¿Qué te detiene?
—Agh Jimin ¿en qué momento te volviste tan pervertido?
—Solo contigo lo soy, eso ya no debería de sorprenderte

Destinado a Otro (Kookmin - Omegaverse) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora