Capítulo 5

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Durante la madrugada Abrel se despierta tras un extraño ruido, este se levanta intentando no despertar a Rīdā.

Abrel: - Susurrando.- ¿Que fue eso? Es como si alguien hubiese pisado hojas...

Abrel se mueve lentamente buscando el origen del ruido. Abrel se mete en medio de unos arboles y comienza a mirar a sus alrededores. En cuestión de milisegundos nota una fría brisa en la parte frontal de su cuello y otra cálida en su oído que le susurra.

Asesino: Muevete y acabo en un segundo con tu vida.

Abrel: -Llevando la mano derecha a la empuñadura de la daga- Esta bien, solo no perdamos la calma.

Asesino: -Pegando el filo a su cuello- Mas te vale no usar esa daga, de lo contrario haré que tu vida valga lo mismo que el estiércol... Si lo entiendes vas a responder a mis pteguntas, primera, ¿Que haces con Rīdā?

Abrel: Al igual estamos saliendo jaja, ¿quien sabe?

Asesino: Contestame seriamente, o sino...

Abrel: -Interrumpiendole- ¿O sino que? ¿Piensas matatme? Jaja menudo ignorante. -Mientras piensa- ¿Como sabrá de Rīdā? Bueno a ver que hace... La verdad es que me la estoy jugando, no sé como saldrá.

Asesino: -Este en un instante realiza el corte y comienza a derramar sangre, sin embargo esta emana de su rostro, un enorme corte en diagonal sobre su rostro, este suelta su arma que resultaba ser un kunai mientras un grito enorme y brutal resuena a través de todo el bosque despertando a Rīdā de golpe.

Abrel: ¿Que... Que acaba de pasar -Dice llevando sus manos al cuello sin notar heridas.- Debería estar muerto... -La cara del joven muchacho se mostraba atemorizada pero no por su aparente inminente muerte sino por el mero hecho de haberla evitado.-

Ejji No KageDonde viven las historias. Descúbrelo ahora