Mi mejor talento es amarte

Capitulo 12

Andrei POV

En el momento que el teléfono sonó sacándome de mis pensamientos y haciéndome derramar el vaso de agua encima por el susto, debería haber sabido que ese día solo iría peor y peor. Claudio me estaba llamando como loco y yo estaba como a una hora en micro del colegio donde se haría el evento, ¿Quién en su sano juicio estaría el día de su primera presentación oficial como cantante, dando vueltas en Marte? Yo poh, porque soy yo y porque no sé, a veces era demasiado disperso, no podía evitarlo.

Liz me llamó para decirme que amablemente había ido por mi ropa a la tintorería, porque si, ni siquiera eso había hecho y si lo seguía arruinando tanto en unas horas simplemente, lo más probable es que mi productor me tirara a cantar al metro de nuevo, es que en serio de repente uno no busca ser impuntual, pero... El tiempo pasa y no nos damos ni cuenta.

Me cambié de ropa y cuando iba saliendo me di con el borde de la mesa en la rodilla mientras buscaba mi teléfono en el bolsillo, maldije cerrando la puerta de un solo golpe al tiempo que respondía

-Andrei, ¿Dónde mierda estás? Puedo cubrirte cuanto quieras, pero Claudio está como león enjaulado, los bailarines ya están acá y solo faltas tú, ¿Te dio pánico escénico o simplemente te harás esperar?- preguntó en un tono casi sarcástico, aunque suave.. Ella era un amor

-Juro que voy a tomar la micro ahora, me derramé agua encima y tuve que cambiarme, pero juro que te llevo hasta un chocolate, en media hora estoy ahí- sonreí antes de cortar la comunicación y hacer parar la micro, me subí, pagué, me senté y cerré los ojos un momento soltando un suspiro y sobándome la rodilla, eso iba a dejarme un feo moretón más tarde.

Llegué casi corriendo, saludé a los guardias y junté mis manos delante de mi mientras Liz me miraba con las manos en la cintura, pasé de largo directo a hablar con Claudio, era obvio que no iba a librarme del sermón

- ¿Se puede saber que diablos te tomó tanto tiempo?- preguntó frunciendo el ceño mientras abría los brazos a sus costados, solo le enseñé los dientes en una sonrisa culpable mientras me pasaba la mano por el cabello

- Es que en serio estaba listo hace mucho, pero no sé, me quedé cazando pajaritos y ya sabes como soy, perdón... Diría que no vuelve a pasar pero no creo que sea así- me justifiqué encogiendome de hombros, porque era cierto ¿Ya había dicho que era disperso? sabía que tenía que trabajar en ello- ¿Me perdonas, peshosho?- pregunté achinando los ojos y casi haciéndole un puchero, sabía que tenia cierta resistencia a cuando me ponía en plan de "niño dulce", arrugó la nariz haciéndome reír y simplemente lo abracé disculpándome de nuevo.

Me presentó a quienes serían mi acompañamiento en el baile ésta noche, los saludé afectuosamente casi disculpándome con ellos también por mi tardanza, se notaba por el sudor en sus ropas que hace bastante habían comenzado a ensayar sin mi.

- Y eso no es todo... Te presentaré a quien será tu bailarín esta noche, ¿Te acuerdas del chico que te comenté?- Asentí dejándome llevar por él un poco más allá de donde estaban los bailarines- ...¡Hernán, ven!- llamó en un tono más fuerte haciéndome mirar en dirección donde su mano se movía, sentí mi cuerpo congelarse en su lugar, no podía ni moverme mientras él giraba, ni siquiera necesitaba que alzara la cabeza, esos rulitos y ese porte lo reconocería en cualquier lugar, sus ojos se encontraron con los míos y quise que fuera todo una pesadilla. Claudio nos presentó y quise reír porque él ni siquiera mostraba un atisbo de que nos conociéramos, estreché su mano entrecerrando los ojos, ¿Han tenido esa sensación en el estómago cuando tienes mucho frío y te pones al sol?, exactamente así me sentí cuando su mano se estrechó con la mía, su mirada no me soltaba y yo quité mi mano primero, aclarándome la garganta