Capitulo 16

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Andrei POV

A uno deberían decirle desde pequeño que la vida jamás se queda quieta en un lugar, que disfrutar de las cosas es el goce de hacer algo bien, porque nunca sabes cuando todo simplemente puede cambiar.

Había sido un fín de semana tan intenso que realmente volver a la realidad no era nada agradable, había dejado a Hernán en la Academia hace apenas unas horas, y además de ya extrañarlo demasiado simplemente pensaba en como las cosas giraban hacia un lado y el otro, impidiendo siquiera procesar todo lo que estaba ocurriendo. Mi celular sonó y sonreí al ver que era Liz

- Justo iba a llamarte, ¿Cómo estás preciosa?- pregunté con una sonrisa mientras cruzaba la calle en dirección al metro, tenía que ir a la productora, o al menos hacer la hora en algo productivo en lo que mi novio salía de sus clases.

- Ah que considerado, ¿Me puedes decir que pasó contigo?... Claudio me llama el Miércoles en la noche diciéndome que no viajaste, me pidió que no te molestara por todo el fín de semana, y ni los whattsapp me respondiste... ¿Por qué no viajaste? ¿Qué pasó?- preguntó entre molesta y curiosa, alcé una ceja porque si había algo a lo que una mujer no se resistía jamás, era a un buen pelambre con lujo de detalles, bajé al metro al tiempo que suspiraba

- ¿Crees que tienes una taza de café y unas galletitas para mi?... Si quieres saber la historia, necesito un poco de consuelo- suspiré casi haciendo un puchero aún cuando sabía que ella no podía verme, la oí reír por lo bajo al otro lado de la línea

- Eres un goloso de lo peor... Ya oh, apúrate y te espero con la comida y el cafecito- dijo antes de cortarme la comunicación, me volví a acomodar los audífonos y pagué mi pasaje antes de bajar hasta el andén y esperar que el metro me llevara, cerré los ojos un momento porque hace mucho tiempo no me sentía tan en paz como en aquel momento.

-... Y entonces, ya estamos juntos otra vez- dije encogiéndome de hombros mientras tomaba otra galleta y la metía en mi boca, Liz se sonó con la servilleta y se limpió los ojos mientras suspiraba

-No puedo creer que te haya ido a buscar.. Es que en serio, creí que cosas así no pasaban- dijo negando un momento, yo reí mientras ella bebía agua- Pero esperate, ¿Y entonces? ¿Qué pasa con sus carreras?

-No sé, o sea Claudio dijo que puedo aplazar un poco el viaje a México, pero con Hernán.. No sé la verdad lo que vaya a pasar, me frustra un poquito que esté reacio a irse si lo llaman- Liz me miró y frunció los labios, yo rodé los ojos- No digo que será fácil para mi, pero ¿Qué hago? ¿Le digo que no vaya? ¿Renunciamos a todo los dos y vivimos de bailar y cantar en eventos?.. No puedo hacer eso, Liz.. Si vieras a Hernán hablar de Brodway, como le brillan los ojos, no quiero que renuncie a sus sueños por mi- dije sinceramente, porque podía ser egoísta en muchas cosas, pero no en algo que dañara a quien amo

-Las relaciones a distancia no funcionan, Andrei... Uno de los dos terminará aburriéndose- dijo y yo lo medité un momento, yo tampoco era amigo de esa opción, pero llevaba ideandome aquello desde el día en que habíamos regresado

-No niego que me da miedo.. Pero a la vez siento que hemos pasado por muchas cosas, tanto juntos como separados, que la distancia es simplemente otra piedrecilla en el camino, y en cualquier caso, falta para que aquello ocurra.. Hernán tiene al menos un mes más de preparación antes que le digan si queda o no seleccionado, hay tiempo para acomodar las cosas- dije mirando mi teléfono- Y hablando de tiempo.. Ya debo irme, mi novio estará esperando por mi y debo pasar por nuestro almuerzo aún, así que te dejo- sonreí poniéndome de pie, ella hizo lo mismo y nos abrazamos un momento antes de besarle la mejilla y despedirnos, hice el pedido de sushi mientras salía de la productora, estaba con el tiempo justo para almorzar con mi shasho.

Mi mejor talento es amarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora