Dislexia ; joshler/tysh

Sesenta y siete

MIREN ESA COSITA BELLA NOMAS AJAKSKAKKSSKJSJW

Con manos temblorosas Josh caminó hacia el escenario, frente a una gran audiencia.

La multitud entró en silencio en cuanto Josh tomó el micrófono.

—Estaba en cuarto grado cuando mi maestro se dio cuenta de que no leía tan bien como los otros niños —empezó el teñido, los nervios se calmaban mientras contaba su historia—. Habían grupos de lectura e, irónicamente, estaban estos tres grupos: los sinsontes, los colibríes y los dodos —dijo mirando a la multitud, sonriendo levemente al encontrar a Tyler—. Bueno, supongo que pueden adivinar que yo estaba en el grupo de los dodos —dijo con una amarga risa—, y nunca me importó, para ser honesto. Cuando escuchaba "pájaro dodo", sólo podía pensar: "diablos, soy genial" —sonrió más abiertamente al escuchar las calladas risas de las personas—. La cosa es que nunca me contaron lo que estos grupos significaban exactamente, todo lo que sabíamos era que había que leer un libro todos los días por treinta minutos y, mientras mi grupo apenas terminaba el primer libro, los otros dos iban por su cuarto —Josh hizo una breve pausa antes de continuar—. Pero en cuarto grado empiezas a escribir ensayos e historias que se supone que deberían beneficiarnos, pero no, ponerme en un aula con silencio sepulcral y esperar que escriba un ensayo de seis líneas sobre cuál era mi estación favorita parecía muy dificultoso para un niño de diez años que ni siquiera podía escribir su nombre apropiadamente —decía mientras su voz se iba poniendo tensa y forzada, pero continuó—. Así que aquí estoy, pensando que lo hice genial, fui con mi maestra para que leyera mi ensayo y podía ver la decepción en sus ojos mientras leía, luego ella me miró y sacudió su cabeza lentamente, como queriendo decir algo que no podía decir, así que sólo dijo "lee de nuevo tu ensayo". Y lo hice, lo leí de nuevo y no vi nada malo así que volví a su escritorio y vi de nuevo esa expresión en su rostro cuando me pidió que lo leyera de nuevo —Josh tomó su botella de agua, tomó un sorbo y continuó—. Así que, la quinta vez, ella sólo sacudió su cabeza, tomó mi papel y me dijo que me sentara —dijo escaneando a la audiencia, hasta que encontró a la señorita Black, el señor Way y el señor Iero—. A partir de quinto grado, toda la primaria y secundaria temprana, a nadie le importó, sólo me veían como el niño que no lo intentaba, así que no lo hicieron tampoco—dijo—. He tenido maestros que me dicen que voy a terminar en la calle vendiendo drogas, pero si buscan la diferencia entre los dos, no hay mucha. En vez de proveer drogas, provees educación que realmente nunca usaremos —habló—. ¿Cuándo voy a necesitar...? ¡Oh! ¡Mi ensayo sobre ADN, ARN y aminoácidos! —dijo con un gran tono burlesco—. Hasta que conocí al señor Way y a la señorita Black —tenía una sonrisa de gratitud—. Ellos no se rindieron conmigo, me llevaron a mi punto de quiebre pero siempre estaban ahí para ayudarme a levantarme —sonrió—. Y luego el señor Way me presentó al señor Iero, un hombre que me hizo sentir completamente estúpido, pero al mismo tiempo me ayudó con esos pensamientos, esos que decían que era tonto y estúpido, me ayudó a detenerlos, así que estoy increíblemente agradecido con ustedes tres —tomó una honda respiración—. Otra parte de este desorden son los chicos que no entienden —dijo cerrando sus ojos brevemente—. No puedo contarles el montón de humillaciones, sobrenombres, moretones y dolores, caídas, ataques de pánico y la completa vergüenza que sentía por culpa de algunas personas de mente cerrada —bufó—. Estoy seguro de que todos ustedes han visto mi foto que ha sido compartida con toda la escuela. A través de todo esto estaba pasando por un mal momento... uno donde... honestamente sólo deseaba no despertar en la mañana. Pero siempre hay algo bueno en una mala situación. Mientras crecía en este período de auto desprecio y constantes recaídas, siempre hubo una persona que se quedó a mi lado —dijo haciendo contacto visual con unos conocidos castaños—. Su nombre es Tyler Joseph. Tyler me ha visto pasar por mis peores y mejores momentos —sonrió suavemente—. Y aunque sólo hemos estado saliendo unos cuantos meses, me hacía el chico más feliz del mundo y estoy extremadamente agradecido, así que gracias, Tyler, te amo, gracias por todos lo que has hecho por mí. Así que para todos en la audiencia, no importan los estudiantes o maestros, no escondan quién son, porque si aprendí algo en este período de mi vida es que no debes rendirte, no importa qué sea, debes afrontarlo... no puedes rendirte —respiró hondo—. Soy Josh Dun y esta es mi historia.

ahH MÁTENME NO TENGO EXCUSA :((((

Me odio por hacerlos esperar perdón los amo son los mejores lectores :(

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