Pholcidae (Hannor)

Capítulo 2

Pholcidae

Por farouche

Traducción: Maya_0196 (Alyssa Selleugra)

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Capítulo 2

A Connor le gustaba el elevador de Cyberlife. Le tomó un tiempo formar esta opinión porque no le gustaba el diseño o el ruido que hacía cuando estaba en uso, pero le gustaba el tiempo que tardaba en llegar desde donde los prototipos se mantenían hasta la planta principal.

Tal vez eso significaba que le gustaba el hecho de que el edificio fuera tan alto. No estaba seguro.

Tomó la moneda con la que estaba jugando con su mano derecha, apretando el metal entre sus dedos. El ascensor había comenzado a detenerse.

Había sido llamado a la oficina de Brown hace tan solo unos minutos atrás. La razón de su presencia no le había sido informado, pero tenía una sensación de malestar en su estómago. Ayer mismo, otro androide había sido asignado y había dejado Cyberlife. Ella había conseguido que la eligieran de su primera opción, pero aun así expresó su temor en irse. Connor no entendía por qué. Caminando por los pasillos blancos y sombríos, no estaba seguro de por qué alguien querría quedarse aquí.

La sensación de incomodidad crecía conforme más seguía caminando. No había tenido muchas opciones, y ya había sido rechazado por tres. No estaba seguro de lo que sucedería si fuera rechazado por las dos últimas. ¿Sería enviado sin nada, o le ofrecerían un trabajo en Cyberlife? Su estomago se retorció ante ese último pensamiento.

—¡Connor, ahí estás! —Una asistente rubia y alegre, con altos tacones que se ajustaban perfectamente a su altura se le acercó—. El Sr. Brown te atenderá pronto, pero me pidió que le esperes en la sala de reuniones 8. ¿Sabes dónde se encuentra?

—Sí. —Es lo que responde Connor, y la rubia suspiró de alivio.

—Gracias a Dios, tengo mucho que hacer. Ve allí, ¿quieres? Él estará allí pronto. ¡Tengo que irme! —Le sonrió y acarició su brazo antes de escabullirse por el pasillo. Connor continuó su andar, dejando atrás una fila de puertas de cristal oscuro hasta llegar a una que tenía una placa con el número 8 en ella.

Era una blanca y monótona habitación, con una mesa y unas cuantas sillas en ella. No había cuadros, pinturas o cualquier decoración en las paredes. La puerta de cristal se cerró tras el con un suave clic, y Connor fue a sentarse en una de las sillas.

Sabía que trabajar para Cyberlife -en el caso que sucediese- no sería para siempre. Sería bueno y beneficioso ganar algo, pero solo lo suficiente para alquilar una propiedad en algún lado, quizás a las afueras de la ciudad, donde los precios eran más bajos. Tal vez iría a Nueva Jerico donde siempre se necesitaban voluntarios, esto de acuerdo con los informes de prensa. Sin embargo, la idea de quedarse aquí, aunque sea por solo unos meses...

Connor escaneó la habitación. Fue por falta de algo que hacer que cualquier otra cosa, una distracción. No descubrió nada, pero entonces-

Componente auditivo: Conversación detectada. Fuente: "Sala de reuniones 9".

Connor se inclinó un poco más hacia delante, aumentando su captación de sonido y escuchando un poco más de cerca.

—...y, por supuesto, estarías enviando actualizaciones e informes sobre su estado. Los divergentes siguen siendo impredecibles, y existe cierta preocupación de que puedan volverse violentos si se sienten confundidos o abrumados ante una nueva... situación. —Ese era Brown, con su voz áspera e irritante. Connor metió la mano en su bolsillo, alcanzando su moneda y apretándola con fuerza.