Prologo

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*se ve a Kitsune abriendo la puerta de la casa con maletas en la mano*
*kitsune: ¡HOLA QUERIDÍSIMOS LECTORES!!!!! ¡¡¡NO ESTOY MUERTAAA!!!

Sasu: demomento, mala hierba nunca muere. Obvio que sigue viva.

Kitsune: ne~ sasuke, deja de ser tan malo con migo TwT

Sasu: ¿como me pides eso si hace meses que tienes olvidadas tus historias?*dice tirándole lo primero que ve*

Kitsune: ¡PROBLEMAS FAMILIARES..... ME VOY A IR A...AHG!!
* le dio un libro en la cabeza *

Sasu: ¡a nadie le importa!

* llega Naruto y se une a Sasuke *

Kitsune: ¿¡y ahora que hice!? *dice detrás del sofá con una cazuela como casco y un cucharón como "espada"*

Naru: ¡¡¡ ME PUSISTE DE UKE MALDITAAA!!!

Kitsune: ¡les dejo el cap....adiós...ah! * dice mientras corre por su vida ya que ahora comienzan con los muebles..*

Vale, perdón, necesitaba hacer esta historia que si no se me olvidaba. La tengo terminada, publicare un capítulo a la semana.

¡espero que nos guste!





Ese día era de lluvia. Yo miraba como pasaba el paisaje mientras me dirigía a la ciudad de Tokyo en tren. Hoy mi hermano y yo decidimos mudarnos a la ciudad, ya que, en el campo, que era donde vivía, todo era más difícil. Para llegar a la escuela eran 2h y media de viaje en autobús y dos y media más en volver. El pueblo más cercano estaba a 2h caminando. Los animales en invierno, arrasaban nuestros cultivos, así que no tuvimos de otra.

- Ototo, ya casi llegamos. Mira, desde aquí se puede ver Tokyo - dijo señalándome la ventana.

En el pueblo más cercano, por suerte, había una estación de tren, a lo que pudimos llegar.

Cogí mi libreta y le escribí "es hermoso aniki". Se lo enseñe y le mire cálidamente con un intento de sonrisa fallida. A él solo se le escaparon lágrimas de los ojos mientras se acercaba a mi y me abrazaba.

- nunca perdonaré a papá por lo que te hizo. Nunca. - nos abrazamos más fuerte, como si tuviéramos miedo de separarnos de nuevo.

Mi padre, cuando no era nada más que un crío, me dono a una familia de multimillonarios que me querían por no se que, separándome de mi hermano, de mi madre, de todo lo que conocía hasta hoy.

En esa mansión, me trataron como "mierda", en sentido literal de la palabra. A veces me golpeaban, otras veces me hacían dormir con el ramado, y otras se pasaban 3 días sin darme de comer. Fue el infierno en vida. Cuando cumplí los 13, escapé, y por casualidad me encontré a mi hermano mayor. Desde entonces estuvimos juntos, pero esos 9 años de mi vida, se quedaron grabados a fuego en mi mente.

Cuando mi padre lo supo, me golpeó hasta dejarme varias fracturas de huesos, serios golpes internos, y...... daños vocales. No es imposible de remediar, pero.... es muy poco probable, cada mes voy al hospital a medicarme, y a veces funciona y logro decir un monosílabo. Pero... después el dolor es insoportable.

Ahora, mi hermano y yo, queremos una vida mejor. Empezar de cero.

Pero, mi verdadera historia comenzó, cuando lo conocí a él.

LA VOZ DEL CORAZÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora