EASY WAY OUT [Editando]

Latido

Hola, perdón por no haber subido capítulos. Mi laptop se descompuso y hasta ahorita me la regresaron.

Perdón por la tardanza y espero disfruten este capítulo.

L@s quiero,

Atte: Paola Sánchez

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Había momentos en los que pensaba que mi vida era un completo desastre y otros en donde parecía que todo iba a estar tan bien, que todos mis problemas iban a desaparecer por arte de magia... Bueno, ahora mismo no sabía si mi vida estaba en orden o no. Mis metas personales se basaban en poder seguir en mi trabajo, pagar la cuenta de Netflix y tener el suficiente dinero o estado de ánimo como para salir con mis amigos.

Pero en este momento, mi mente se enfocaba en saber qué estaba pasando con Lucian y yo. ¿Teníamos una relación? En cierto modo, sí.

Entonces, por qué mierda sentía que toda esta farsa me iba a destruir completamente. Tal vez era mi imaginación o mi completa falta de confianza en cuanto a las relaciones gracias al puto trauma que sufrí con Josh.

Sea cual sea la causa, tenía en claro que Lucian me había ayudado en formas que nunca creí posible. Por más que me resistía a ver la realidad, sabía que estaba cayendo en algo peligroso. Algo en lo que me había prometido nunca volver a experimentar. Mis emociones me traicionaban y los sentimientos que tanto había estado guardando con recelo, iban saliendo poco a poco, escapando de mi herido corazón que en estos momentos estaba sanando lentamente.

Me asustaba sentir algo por él. No era algo que estaba destinado a pasar y eso era lo que lo hacía más especial. Entendí cosas que jamás pensé que me importarían y al final, aprendí a querer su manera de expresarse.

La noche de ayer había tomado un giro que me había aturdido bastante. Era algo que no había experimentado jamás. Quiero decir, en la universidad hubo alguno que otro encuentro con chicos, pero jamás me había aventurado a tener algo más que besos y un poco de toqueteo por el simple hecho de que no me sentía bien con mi cuerpo. Así que simplemente lo detenía y nunca me importó hacer algo más.

Pero ahora el calor que emanaba de su cuerpo me cobijaba más que las mantas que nos arropaban, su respiración era calmada y entrecortada y sus brazos me abrazaban con firmeza a su pecho como si no quisiese que me fuera a ningún lado. Todo estaba en silencio, pacífico...

Mi despertador marcaba las 8:30 de un viernes por la mañana. Pronto tendríamos que ir al trabajo y eso me tenía nerviosa. Saber que iba volver a ver a esos paparazzis y a la gente que murmuraba en los pasillos de SGI... me daban escalofríos de solo imaginarme cuántos chismes se habrían formado.

— Lucian. — Susurré para que se despertara. Sus manos me apretujaron más a su cuerpo y sentí el cosquilleo de su aliento en la nuca. — Tenemos que levantarnos. — Sabía que estaba arruinando el momento, pero mi sentido de la responsabilidad era muy insistente en cumplir con el trabajo. — Se nos hará tarde.

Concluí mientras esperaba su respuesta, pero Lucian optó por no responder y en vez de eso, hizo una maniobra en donde me tenía encima de él, sentándome en sus piernas. — ¿Qué te parece si hoy nos saltamos la parte de ir al trabajo y nos quedamos aquí? — dijo sonriendo y un poco adormecido al ver como mi cabello estaba hecho un desastre y mi respiración se agitaba por el movimiento.

Sin olvidar que aún estábamos en ropa interior y el calor de su pecho era cada vez más intenso. Traté de permanecer seria, pero sus ojos claramente querían enviarme un mensaje completamente diferente.

— Creo que ya hemos tenido muchos percances como para no ir al trabajo. — Dije en lo que me trataba de arreglar el cabello para verlo mejor.