Capítulo 6

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- Hey buenos días, linda. ¿salimos a correr?

Escucho el ruidoso sonido de mi celular y de inmediato abro un ojo, al tanteo intento agarrar mi teléfono de la mesita de noche pero fallé en la misión logrando que el celular caiga al suelo.

Pero sin importarme paso algunos minutos sacándome la pereza, me levanto de la cama, agarro mi teléfono y lo reviso para ver quien ha sido el causante de mi despertar tan repentino.

Pero al observar la pantalla y ver su nombre ahí sonrío y sólo pienso en mantener esa sonrisa y la felicidad absoluta dentro de mi.

Contesto su mensaje, luego me alisto para mi rutina mañanera, salgo de casa, saco mi celular y pongo la canción Go go go de sws y empiezo a correr.

Generalmente acostumbro a correr lo más lejos posible de casa, no es que quiera huir o algo por el estilo pero siento que es necesario salir y despejarse así que eso hago.

Llevaba alrededor de 30 minutos corriendo y aún no llegaba al lugar donde me encontraría con Ethan.
Sentía que no podía continuar corriendo así que me detuvo delante de una linda casa y me senté en la cera de la calle.

-Hey boo, no puedo correr más, ¿vendrías por mi a esta dirección? - digo hablando por teléfono con Ethan.

-Claro honey voy para allá - respondió.

Los minutos transcurrían y Ethan aún no llegaba, me estaba desesperando un poco, personas extrañas pasaban y murmuraban, no quería prestarles atención pero me incomodaban, así que volví a correr no me gustaba estar sola en este lado de la ciudad últimamente se ha vuelto peligroso.

Corro, corro con más fuerza hasta que en serio no puedo más, mi cuerpo no da más y definitivamente pienso en parar.

Estaba un poco asustada, las calles estaban desoladas y el clima no me favorecía, el frío invadía cada parte de mi cuerpo, deseo tanto que Ethan llegue ya, no tengo buenos presentimientos.

Camino un poco más hasta llegar a un parque que daba terror pero necesitaba sentarme, al frente estaba la calle y un anciano está pasando pero de repente se cae. No lo dudo ni dos veces y corro para ayudarlo.

-Hey, ¿Se encuentra bien? - pregunto mientras ayudo a pararlo.

-Sí, sí, gracias señorita- responde.

-No hay de que, es todo un placer señor, debe tener más cuidado

-Sí, lo sé - responde y me queda mirando fijamente.

- ¿Le sucede algo? - pregunto

- No, no, es que te pareces mucho a mi nieta

- Oh ya jaja - digo un poco asustada por su mirada.

Ethan ven rápido es en lo que me pongo a pensar, el señor eran muy tierno pero a la vez me daba terror había algo raro en su mirar que hacía que me asustara mucho.

- Usted linda señorita ¿no es de aquí? - pregunta.

- No quiero sonar irrespetuosa pero para ser sincera no le interesa eso y si me disculpa tengo que irme - digo levantándome del asiento

- ¡Hey, espera! - Dice el señor siguiéndome.

Apresuro mi paso, giro la cabeza y el señor me viene siguiendo, Dios que terror, quiero correr pero el tobillo me duele, camino más rápido de lo que hacía, pero el anciano también lo hace y está a punto de alcanzarme, giro la cabeza de nuevo, está muy cerca de mi, me tropiezo con alguien sorpresivamente y grito.

-¡Suéltame! ¡Auxilio! - grito con todas mis fuerzas.

-¡V! ¡Soy yo! Tranquila... - dice Ethan.

- ¡Dios!, Boo gracias, llegaste a tiempo - lo abrazó con todas mis fuerzas.

-¿Qué pasaba, V?, ¿Por qué estas tan asustada?

- Un anciano me venía siguiendo, tal vez estoy loca o es la paranoia por los crímenes que están sucediendo últimamente pero ese tipo tenía algo extraño

- Tranquila V, ya estoy aquí para protegerte, nunca te dejaré, ahora vamos a casa

- Sí, por favor - tomo su mano con mucha fuerza.

Caminamos un poco rápido de regreso a casa, no sé, me sentía extraña pero ni idea de porqué, Ethan se quedó en mi casa hasta el anochecer ya que había organizado una cena con su familia y tuvo que irse.

Hoy me quedaría sola en casa, mamá tenía turnos largos en el trabajo, tal vez no llegue a dormir.

Voy a prepararme un baño relajante, me sumergí en la bañera y pongo música, me pongo a jugar con las burbujas, incluso me estaba quedando algo dormida hasta que un fuerte ruido me levantó.

De prisa salí de la bañera, tomé una toalla y corrí hacia donde el ruido provenía.
Estaba la ventana rota y había una ladrillo tirado con una nota que decía.

"Qué linda de te ves V, cuídate mucho porque te quiero sana para cuando te tenga"

Realmente estoy asustada, quien en su sano juicio hace esto y a las doce de la noche, es muy aterrador.

˗ˏˋ Sin Descanso ˎˊ˗ ⚘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora