Adoptada ✔ [Bilogía Adoptada #2] || Editando

Capítulo 5

La casa Jensen constaban de dos pisos, por fuera estaba pintada de color salmón y tenía un jardín bien cuidado con un par de arbustos y algunas flores; en el piso del porche había una alfombra que rezaba "Bienvenidos" y la puerta tenían una corona trenzada de madera, le daba un toque rústico a la casa.

El señor Jensen metió la llave en la cerradura y al girarla, la puerta se abrió dándonos paso para entrar. Con un movimiento de manos, el señor Jensen me invitó a adentrarme a mi nueva casa.

Los nervios me estaban comiendo viva, no podía quedarme quieta así que jugueteaba con los dedos de mis manos para contener la ansiedad que me estaba entrando.

Al entrar a la casa lo primero que se veían eran las escaleras hacia el segundo piso, junto a estas se encontraba un pequeño mueble con un florero y un portarretrato con una foto familia de los Jensen; al seguir recto se encontraba la sala de estar, amueblada con sofás color azul oscuro y un mueble dónde se encontraba la televisión y más portarretratos. En una pared junto a una puerta en la izquierda se encontraba una fotografía en grande de los Jensen, un nudo se formó en mi estómago; la inseguridad de no poder pertenecer a la familia me invadió.

Pero lo que más llamó mi atención fue un cartel que se encontraba en la pared opuesta al mueble de la televisión, un cartel que en letras grandes citaba "Bienvenida a casa, Skyler".

—Bienvenida a casa —habló el señor Jensen.

Unas náuseas me invadieron, todo esto era lo contrario —o mejor— de lo que imaginaba una bienvenida.

Me estaban haciendo sentir bienvenida sin siquiera conocerme.

—Diles a los chicos que ya llegamos —indicó la señora Jensen.

—Les avisé cuando aparcamos, no tardan en bajar.

—Sky linda, ponte cómoda —Sarah señaló los sofás.

Un poco dudosa, caminé hacia el interior de la sala, se aproximaba el momento que me temía más: conocer a mis nuevos hermanos.

Alrededor de unos quince segundos de espera, escuché cómo se avecinaban pasos desde las escaleras.

Respira Sky, todo saldrá bien.

Eso espero.

Los tres hermanos hicieron su aparición y los cincos se posicionaron frente a mí, de esa forma me sentía pequeña e intimidada.

Observé a los tres chicos: el más alto me sacaba al menos una cabeza y media de altura, su cabello era castaño y lacio; el segundo era un poco más bajo, su cabello era un tono más oscuro y en él habían rulos un tanto alborotados; por último se encontraba una chica un poco más baja que yo, su rostro era fino con un leve parecido a la señora Jensen, su cabello era igual de castaño y en él habitaban ondas que bajan sin cuidado por su espalda. Los tres tenían el mismo tono miel en sus ojos.

La señora Jensen llamó la atención de todos y sus hijos la miraron expectantes.

—Chicos, quiero presentarles a Skyler: su nueva hermana. Sky ellos son Anthony, Bradley y Jessica —miré asombrada a la chica, Jessica era el nombre de mi madre.

Los tres hermanos giraron a verme y dos de ellos sonrieron, un poco nerviosa les devolví la sonrisa. El chico de los rulos no mostraba ninguna emoción en su rostro.

No sabía si tenía que saludar, hablar o decir algo; los nervios no me dejaban pensar y me sentía tonta.

—Papá y yo tenemos un asunto pequeño por resolver y lamentamos dejarte sola el primer día —se disculpó la señora Jensen—, los chicos estarán contigo el resto del día y nos veremos de nuevo en la noche para la cena de bienvenida que tenemos reservada.