Por Favor, Contesta.

Capítulo 8.-

- Deberías preocuparte más por ti hijo. –

- Nada de eso Mamá, estoy bien. –

- No lo estas, estas pálido. ¿has comido bien? Me ha dado tanta pena que nuestros vecinos siempre cuiden de ti. – aquella mujer de edad, estaba sonriendo a aquel chico el cual. Tenía la cara algo morada por los golpes de aquella paliza de algunas semanas atrás. –

- Tranquila mamá, por favor tu solo recupérate ¿sí? –

- Minho, debes entender que yo moriré, y que por favor... debes seguir adelante. –

- No quiero que eso pase. –

- Pero pasara, es parte de la vida. –

- ¡No quiero! –

~☆~☆~☆~

Han pasado semana donde no he visto a Minho. Y su teléfono no me contesta. Es decir, no contesta el celular de Jinki. Ni siquiera eso. Kibum y Jonghyun tampoco lo han visto, o al menos no ha llegado a su casa.

Así que posiblemente se haya aburrido de mí, era lógico, el aún es joven, está en plenos estudios, y en plena edad de encontrar a alguien de su misma edad y gustos. Una chica linda, que lo acompañe y también...

- Joder. – duele solo decirlo. Y más imaginarlo.

Una chica linda. Una chica. Joven y con el cabello largo y suave. Una chica. Alguien quien puede tener un futuro con él. Alguien quien puede...

Podría darle el futuro que yo mismo no podía darle a Jinki en ese entonces.

Jamás podría darle hijos porque soy un hombre, y el también.

Supongo que junto a él, su futuro estaría estancado.

Eso es lo que me dijo la Abuela de Jinki la primera vez que me presente con la familia de mi prometido. Y así fue cada vez que tenía que verlos, siendo una vergüenza para ellos. "el hijo legitimo no podrá dar herederos si sigue jugando de esa manera con alguien del mismo sexo, es repugnante y decepcionante." Por esa misma razón, Jinki decidió que debíamos estar lo más lejos posible. Y así estaba bien para nosotros. Bien para mí, pero no sabía sinceramente así estaba bien para él. Sabía que en el fondo, él quería algo que yo no podía darle.

Que decepcionante.

"Eres alguien decepcionante, Lee Taemin."

Cerbero estaba frente a la puerta de nuevo, mientras yo estaba fumando en mi balcón. Tratando de no pensar en todo aquello. Tocándome el cabello, que desde aquel día en el que Minho me había dejado solo. Ya no existía aquella cola de caballo en mí, era un simple chico con el cabello tan normal que de verdad me daban ganas de golpearme a mí mismo. Termine tirando aquel cigarro casi nuevo por el balcón.

Si Minho se había aburrido de mí.

Me lo dirá en la cara. Tome mi chaqueta y las llaves de mi auto. Pero antes de siquiera salir de mi departamento. Young Soo estaba aquí. –

- ¿A dónde vas? –

- ¿debo darte explicaciones acaso? –

- Vas por ese niño ¿verdad? ¿Por qué vas tu eh? ¿Acaso él ya te dejo de lado? – le empuje fuertemente de mi puerta y la cerré con llave. Dirigiéndome a las escaleras de mi edificio para bajar, ni loco esperaba al ascensor, menos para estar en un mismo cuarto cerrado con este tipo.