Capítulo 20.-

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La puerta fue abierta por los empleados de la casa. Quedando algo impresionados por quien estaba delante de ella. Pues pocos sabían quién era realmente y otros simplemente habían escuchado rumores de aquello.

De todas formas, los susurros no se hicieron de esperar.

- Llegaste. – le recibió el dueño de aquella casa, mientras bajaba las escaleras arreglando los botones de su chaqueta, dando la orden de que su cena se retrasara un poco para poder recibir a aquel extraño invitado. – pensé que pasarían más días antes de verte.

- Perdón la demora. Pero Taemin, estaba muy nervioso en saber si era lo correcto o no. – dijo mientras le entregaba en sus manos una caja bien decorada con un moño. – de todas formas, no acepto quedarse con el traje de su boda. Y prefirió que yo te lo entregara en vez de verte. Aun por una extraña razón siente pena al dejarte plantado. –

- No lo culpo. Pero de todas formas... suponía que debía ser asi. – dijo recibiendo la caja, e invitando a su primo al salón para algo de Té. - ¿él está bien ahora, Kibum? –

- Si, a pesar de que han pasado algunas semanas. – menciono mientras aceptaba y se sentaba en uno de los sillones de aquella sala. – Taemin ha estado más calmado y más sereno, incluso decidió que esperaría a que Minho terminara sus estudios para conseguir un trabajo.

- Entonces... supongo que ha estado bien. –

Al pasar a la sala para poder aceptar aquel té que su primo le ofrecía, se sentó frente a él. Cruzando sus brazos. Mientras que el contrario le imitaba sirviendo ambas tazas.

- Debo admitir si, que los primeros días, estaba asustado. Pensó que lo irías a buscar, y que lo tomarías de nuevo. Me sorprendió que no hicieras un escándalo. –

- Sabes que no soy de esos. Y, de todas formas, alguien ya me había avisado que Taemin no llegaría a la boda. Supongo que uno de mis empleados vio que Taemin no era feliz de todo conmigo.

- ¿acaso no estaba feliz aquí? –

- Supongo que al final no, aunque tenía todo lo que pidiera aquí, pero siempre estaba nervioso y pensado. Creo que debí haberme esforzado más para poder hacerlo feliz. -

- Le mentiste por meses, Young Soo. No hagas como si fueras la victima aquí. – dijo desafiante y enojado, mientras dejaba que el olor al té servido le llegara a calmarle. – Si yo fuera Taemin ya estarías demandado. Pero Supongo que Taemin es mejor persona que tú y yo. –

- Solo... ya no quería verlo lejos de mí. –

- No era la forma Young. –

- De todas formas, sentí que podía tenerlo así para mí. Sé que no debía, pero... ya no quería que lo quitaran de mi lado, no sabes... -

- Yo lo se Young Soo. Todos sufrimos cuando quitaste a Taemin de nuestras vidas.

- No es lo mismo, ustedes no lo amaban como yo.

- Pero Minho si, Minho lo ama igual o más que tú. Además, se todo lo que has sufrido, lo sé porque yo estaba allí cuando supimos de quien eras hijo. Se lo mucho que dolió que nos separaran de ti. Pero no tenías el derecho de hacer lo mismo con él. Taemin jamás fue tuyo.

Young Soo se tocó la barbilla. Sabiendo que su primo tenía razón.

- ¿Van a estar bien?

- Si, sabes que Taemin ha sido el más fuerte de nosotros. –


Asintió suavemente mientras llevaba su vista al chico.

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