i'm fine - yoongguk

넷

Yoongi.

Bueno, al final no le pude restar importancia y terminé siguiendo a Jeongguk.

Después de tanto caminar, llegue a una casa grande y blanca, toque la puerta y al ver que nadie abría, me asomé por una ventana.

"Oh, dios."

Me encontré al pequeño castaño en el suelo de su casa ensangrentado y asustado entré por una ventana para después acercarme y poner su cabecita en mi regazo.

—Dios, Ggukie, ¿Qué te pasó?. —Acaricie su mejilla y llamé a una ambulancia.—

—T-Tranquilo, Hyung. E-Estoy bien. —Me sonrió como pudo y yo sólo lo abracé con cuidado.—

—Pronto estarás bien, bebé. —Murmuré después de que los paramédicos dijeran que venían en camino.— ¿Qué te sucedió?

Vi que Jeongguk iba a hablar pero en ese preciso momento llegó la ambulancia, subieron a Ggukie a una camilla y lo metieron al auto. Yo subí a mi convertible y los seguí.

"¿Qué le habrá pasado?"

Al llegar al hospital, me estacioné y entré corriendo. Di mis datos para poder pasar y me quede en la sala de espera.

Ugh, ahora me siento fatal, debí haber insistido en acompañarlo. Por cierto, ahora que lo pienso, si no lo hubiera seguido, ¿habría muerto?

Tal idea me aterró, sé que no conozco tanto al pequeño, pero tengo un sentimiento de protección, él se ve frágil, es pequeño y delgado, necesita a alguien junto a él.

Y no me molestaría ser esa persona.

Yo, a comparación de él, soy una persona fuerte, pude enfrentar mis problemas, pero él sigue en la oscuridad, el necesita una luz para poder salir de esa oscuridad en la que el mundo lo ha sumergido.

Ah, estoy diciendo esto y no estoy seguro si en verdad está sufriendo, pero, encontrarlo ensangrentado en su casa no es normal, algo lo está atormentando y yo descubriré que es.

[...]

La enfermera me había dejado entrar a su habitación, abrí con con sumo cuidado la puerta y lo miré, su delicado cuerpo estaba postrado en esa cama.

Al entrar por completo cerré la puerta y me acerqué, logré divisar vendas en sus pequeños brazos y en sus manos, su rostro tenía moretones y algunos curitas. Acaricié de este con suavidad, igual, el menor no se daría cuenta ya que estaba anestesiado para que su dolor pudiera calmarse.

Suspiré con algo de tristeza, ¿Quién podría hacerle algo así a un pequeño demasiado adorable e inocente?. Esto me hace sentir decepcionado de la mierda de mundo en la que vivimos.

Oh, pero lo que más lastima me da es que siempre lastiman a los ángeles , a las almas puras, y gracias a ello, nuestro planeta se está pudriendo, sólo hay almas corrompidas, y, aunque duela, no podemos hacer nada para remediarlo.

Pero, yo haré algo y salvaré a Jeongguk de esto, quiero que siempre sea el niño inocente, que su pureza se mantenga pero para eso necesito que él confíe en mí. Algo que seguro será complicado.