Gran Maestro del Disfraz | Mo Dao Zu Shi

7• Torre

Una vez en LanLing

Hace algunos años Jin Ling no vivía en los suburbios de Yunmeng sino en la ciudad próspera de LanLing, aunque no había demasiada diferencia, él seguía bajo el cuidado de su estricto tío ya que su madre había decidido emprender un nuevo camino como dueña de su propia cadena de restaurantes, una idea que le pareció algo genial a su familia ya que ésta desde joven había mostrado su talento por la comida y su pasión por la cocina, pero ello le quitaría tiempo, y lo que menos quería era dejar a su pequeño hijo a manos de una niñera. Por esta razón Jiang Cheng se ofreció a cuidar de Jin Ling mientras Jiang YanLi se mantenía fuera de la Casa Jin.

Jin Ling tampoco parecía ser infeliz con esta idea, adoraba a su tío, estos acontecimientos sucedieron cuando el menor tenía alrededor de siete años, en ese entonces el menor de los Jin era un niño dulce y cariñoso. Pero esta situación fue cambiando a medida que avanzaban los años, y la actitud iracunda que llevaba por ambos lados de su familia salió a flote cuando las personas de su escuela empezaron a intimidarlo.

El lugar donde estudiaba en ese entonces era la Torre Koi, una escuela manejada por su familia, específicamente por su abuelo, ahí se educaba mayormente a los hijos de las familias poderosas y como plus adicional, se entablaban las primeras relaciones sociales de los jóvenes herederos. Aquella escuela parecía un palacio antiguo, pero de antiguo no tiene nada, muchos de estos salones habían sido remodelados recientemente, buscando retratar un ambiente como del colegio Hogwarts, incluso sus uniformes amarillos tenían cierta similitud, y como en todo colegio de ricachones no podía faltar, el bravucón de la escuela que era nada más y nada menos que su primo Jin Chan, un niño de curso superior, mucho más alto que él obviamente y con los rasgos más duros que los de Jin Ling, haciendo que su aspecto no sea del todo agradable, quizá la palabra más adecuada para describirlo podría ser intimidante. Todos los días, este jovencito buscaba la manera de pelear contra Jin Ling. A pesar de que en las familias siempre existe un orden jerárquico, para los niños cosas como esta no tienen importancia o quizá simplemente no logran entender, por ello Jin Chan no tiene miedo de molestarlo a pesar de que Jin Ling sea el próximo heredero de la Casa.

Hoy era un día como esos, pero aún mejor. Hoy estaban en el aula magna o para llamarlo de manera simple, estaban en el auditorio de la escuela donde su clase haría su primera escenificación.

— Mírate con ese disfraz, acentúa lo idiota que eres —Jin Chan arrojó sus palabras con una clara intención de lastimar, en lo profundo de su corazón odiaba a Jin Ling y cualquier cosa era motivo para descargar sus sentimientos.

Era cierto, portar un disfraz de doncella en una obra teatral, siendo él un auténtico hombre, lo hacía ver idiota. ¿Pero qué podía hacer si en su clase no había ni una sola jovencita? Además ¡ninguna otra estudiante de la escuela se encontraba disponible como para ocupar su lugar!

Nada, no se pudo hacer nada. Con resignación la maestra y encargada del número teatral de la clase solo podía disfrazar a un varón de dama, y como quién desea hacer justa la cosa, aplicar un sorteo con los nombres de todos los estudiantes para que el elegido y gran vencedor, tenga la dicha de ser la estrella de la noche interpretando nada más y nada menos que Julieta, la niña de 13 años, joven amante de Romeo, quien tiene un amor prohibido y que comete suicidio al final de la obra. Absurdo. ¿Por qué entre tantas historias tenían que escoger esta? ¿Por qué lo tenían que humillar con semejante disfraz de niña boba y tan absurdo papel? Patético, ridículo, realmente ridículo.

No era que le molestara ser disfrazado de niña, pero prefería mil veces ser Atenea, la diosa de la sabiduría a que ser Julieta, la joven amante.

Hoy realmente no tenía demasiadas ganas de pelear, hoy le tocaba hacer el ridículo en público así que tenía que estar listo para hacer semejante estupidez.